En Yemen las minas y las bombas de racimo siguen cobrando víctimas
El país pide ayuda para erradicar estas armas tras contabilizar más de 300 civiles muertos desde el inicio de la tregua.
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Desde abril de 2022, 108 civiles murieron y 216 resultaron heridos como consecuencia de minas, bombas de racimo y otros restos de guerra.
El Centro Ejecutivo para la Acción contra las Minas del gobierno de Saná confirmó la muerte y lesiones de 324 civiles como resultado de las minas y bombas de racimo dejadas por la coalición de agresión, desde el inicio de la tregua en Yemen.
En un comunicado, la entidad reveló la cifra de 108 fallecidos y 216 heridos como consecuencia de estos y otros restos de guerra, desde la entrada en vigor de la pausa en la guerra el 2 de abril pasado.
El Centro llamó a proporcionar suministros y limpiar áreas en Yemen de minas y bombas de racimo que las fuerzas de la coalición saudita bombardearon en áreas dispersas.
Naciones Unidas anunció en agosto último, citando a su enviado para Yemen, Hans Grundberg, que “las partes beligerantes acordaron extender la tregua por dos meses más, en las mismas condiciones”.