Reino Unido elude sus propias sanciones sobre petróleo ruso
Las empresas utilizan una operación que les permite registrar el combustible como procedente de otro lugar.
El Reino Unido compró al menos 39 envíos de petróleo ruso desde febrero, aunque los cargamentos se registraron como importaciones de otros países, informó el Sunday Times, citando datos de tráfico de petroleros y estadísticas comerciales.
Las remesas de combustible, por un valor de alrededor de 236 millones de dólares, se entregaron a los puertos ingleses después de las transferencias de barco a barco, una práctica utilizada cuando los grandes petroleros no pueden atracar debido a su tamaño y transfieren su carga a puertos más pequeños.
De acuerdo con las conclusiones de la publicación, esto brinda a las compañías navieras una forma de asentar su carga sin proporcionar el origen real de la emisión. De esta forma, un envío de productos fabricados en Rusia puede registrarse como originario de Alemania si la empresa de esa nación lo lleva a un puerto del Reino Unido.
Sunday Times pudo rastrear docenas de remesas llegadas a los puertos británicos desde marzo, anotadas como procedentes de Alemania, los Países Bajos, Polonia, Francia y otros países.
Según los informes, al menos 13 de ellos llegaron en junio y julio. Sin embargo, las cifras oficiales de la Oficina de Estadísticas Nacionales de Londres muestran que el país no recibió combustible de Rusia en esos meses.
De acuerdo con expertos marítimos las transferencias de barco a barco son populares desde que las naciones occidentales comenzaron a apuntar a las exportaciones de carburante ruso este año, como parte de las sanciones por la operación militar en Ucrania.
El embargo del Reino Unido sobre las importaciones marítimas rusas está programado para entrar en vigor el 5 de diciembre. Sin embargo, será difícil para Londres detener la práctica, incluso después de esa fecha, señalan los especialistas.