Destituye Lula al comandante del Ejército brasileño
El general Júlio César de Arruda asumió el cargo en el gobierno de Jair Bolsonaro, y fue sustituido por el actual comandante militar del Sudeste, general Tomás Miguel Ribeiro Paiva.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, destituyó al comandante del Ejército, el general Júlio César de Arruda y en su lugar nombró al actual comandante militar del Sudeste, general Tomás Miguel Ribeiro Paiva.
Medios locales señalaron que el general Arruda asumió el mando del Ejército de manera provisional el 30 de diciembre del año pasado, todavía bajo el Gobierno del exmandatario Jair Bolsonaro.
Según el acuerdo del equipo de transición de Lula con la Administración anterior, el cambio de mando debía producirse antes de que el nuevo Gobierno asumiera las riendas del país el 1 de enero pasado.
Arruda fue confirmado en el cargo por el ministro de Defensa, José Múcio Monteiro, el 6 de enero.
Dos días después, un grupo de bolsonaristas radicales invadieron y destrozaron el Congreso, el Palacio de Planalto y el Supremo Tribunal Federal en la ciudad capital de Brasilia. Desde el lugar de los hechos, también se reportaron actos vandálicos y robos.
En ese sentido, Lula declaró el miércoles pasado que los servicios de inteligencia de las Fuerzas Armadas y la Agencia Brasileña de Inteligencia fallaron al no advertir sobre los posibles ataques golpistas.
El ministro de Defensa, José Múcio Monteiro, por su parte, descartó la participación “directa” de las Fuerzas Armadas en los acontecimientos del pasado 8 de enero. Agregó que “si algún elemento individualmente estuvo involucrado en los hechos, responderá como ciudadano”.
El viernes último, antes de ser despedido, Júlio César de Arruda asistió a una reunión en el Palacio del Planalto con Lula Da Silva, el Ministro de Defensa y los comandantes de la Marina, Almirante Marcos Sampaio Olsen, y de la Aeronáutica, Brigadier Marcelo Kanitz Damasceno.
Este fue el primer encuentro del presidente con los comandantes de las Fuerzas Armadas después de defender el castigo a los militares involucrados en los actos de golpe de Estado.