Irán formalizó su ingreso oficial a la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), tras celebrarse la cumbre virtual de los líderes de este grupo presidido en la actualidad por la India.

Al intervenir, el primer ministro indio, Narendra Modi, elogió la incorporación de Teherán al organismo y transmitió sus mejores deseos al presidente Ebrahim Raisi y el pueblo iraní.

La adhesión crea un nuevo espacio de acercamiento con Rusia y China, y permite a Irán avanzar en su búsqueda por poner fin al aislamiento diplomático, apuntó.

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La decisión de Irán para formar parte de esta alianza fue tomada en la pasada cita en Uzbekistán, luego de ser aprobado el cambio de su condición de país observador a un miembro de pleno derecho.

Modi también resaltó la acogida de la firma del memorando de compromiso de Bielorrusia para sumarse a la OCS en el futuro.

Por su parte, el mandatario iraní Ebrahim Raisi expresó su satisfacción por la unión del país a la OCS y la esperanza de que la presencia de Teherán en la alianza sea especial e influyente y proporcione una plataforma para la seguridad colectiva y el fortalecimiento de las relaciones entre países soberanos para enfrentar contra las amenazas de ambientales.

Creada en 2001, la OCS congrega a más de la mitad de la población mundial, tiene como puntos centrales la seguridad regional, la lucha contra el terrorismo regional, el separatismo étnico y el extremismo religioso.

El bloque está conformado por nueve Estados miembros: Rusia, China, India, Irán, Pakistán, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán; tres observadores: Afganistán, Bielorrusia, y Mongolia; y seis asociados: Armenia, Azerbaiyán, Camboya, Nepal, Sri Lanka y Turquía.