Porsche rompe con Red Bull
El fabricante alemán comunica que no se unirá al equipo energético, pero mantiene su interés en la Fórmula 1. Audi ya confirmó su entrada en 2026, publicó el diario deportivo AS.
Porsche no se asociará a Red Bull para competir en la Fórmula 1. Después de meses de negociaciones, la firma alemana ha emitido un comunicado este viernes en el que descartan la asociación con la firma de bebidas energéticas, su equipo de carreras o su fábrica de motores.
“En los últimos meses, Porsche y Red Bull han mantenido conversaciones sobre la posible entrada de Porsche en la Fórmula 1. Las dos compañías han llegado a la conclusión conjuntamente de que estas conversaciones no continuarán”, precisa el fabricante de Stuttgart.
Entre las causas de esta ruptura, apuntan, está la negativa de Red Bull de ceder la mitad de la propiedad de su escudería. En Milton Keynes estaban a favor de un patrocinio de los motores, o una absorción de las instalaciones de Red Bull Powertrains, pero no querían perder su peso en el equipo de carreras.
“La premisa fue siempre una asociación basada en la equidad, que incluyera no solo una asociación en motores, sino también en el equipo. Esto no se ha podido conseguir”, sostiene Porsche, que en cualquier caso mantiene su interés por la Fórmula 1.
Según fuentes del campeonato, Porsche seguirá explorando vías de entrada al Gran Circo a través de otras escuderías. Siguen mirando, negociando o interesándose por otros equipos. La nueva reglamentación de motores (desde 2026) simplifica ligeramente las unidades de potencia con la eliminación del MGU-H, y se refuerza la aportación eléctrica mediante el MGU-K, además de emplearse combustibles sintéticos.
El grupo Volkswagen ya confirmó su entrada en la F1 a través de Audi como fabricante de motores, a partir de 2026. También se entiende que invertirán en Sauber para constituirlo como su propia escudería una vez termine el patrocinio de Alfa Romeo en diciembre de 2023. Pero la llegada del gigante alemán de la automoción al Mundial debía producirse a través de dos marcas, no solo una, y la Fórmula 1 sigue esperando a Porsche.