El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, vetó 63 artículos de un proyecto de ley aprobado por el Congreso que proponía flexibilizar los permisos ambientales para obras de infraestructura.

La decisión fue anunciada por la ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, en una rueda de prensa, y responde a la necesidad de “garantizar la integridad del proceso de licenciamiento”.

"Estos vetos garantizan que el licenciamiento sea un instrumento para un desarrollo responsable, manteniendo criterios técnicos sólidos y el respeto a nuestra Constitución", manifestó Lula.

Hoje tomei uma decisão importante para o Brasil, depois de muito diálogo e análise cuidadosa com nossa equipe de governo. Sancionei a Lei Geral do Licenciamento Ambiental com vetos estratégicos para proteger o meio ambiente, garantir os direitos de povos indígenas e quilombolas e…

— Lula (@LulaOficial) August 8, 2025

Mediante una mensaje en X, el mandatario trasladó la disposición de consolidar un nuevo marco legal capaz de impulsar el crecimiento sostenible, preservar la riqueza y promover la justicia social.

Contenido del proyecto y artículos vetados

El proyecto, sancionado parcialmente por Lula, contenía cerca de 400 dispositivos. Entre los artículos vetados destaca la implementación de la Licencia por Adhesión y Compromiso.

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Dicho mecanismo, criticado por ambientalistas como un autolicenciamiento, permitía a los interesados iniciar obras con una simple descripción del proyecto y sus impactos, sin estudios ambientales previos.

También fue bloqueada la transferencia de competencias a los gobiernos estatales para definir criterios de licenciamiento ambiental.

Esta medida, de acuerdo a los expertos, podría fomentar una competencia entre regiones para relajar requisitos y atraer inversiones.

Otro veto relevante fue el artículo que restringía la consulta a  pueblos indígenas únicamente con tierras ya homologadas, excluyendo a comunidades con procesos de demarcación en curso.

Licencia Ambiental Especial 

A pesar de los vetos, Lula mantuvo la figura de la Licencia Ambiental Especial, destinada a agilizar permisos para proyectos considerados estratégicos por el Gobierno, como la exploración petrolera en áreas marítimas cercanas a la desembocadura del río Amazonas.

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El presidente firmó una medida provisoria para que esta licencia entre en vigor de inmediato, aunque vetó el artículo que permitía su tramitación en una única fase.

La ministra Marina Silva aseguró que esta modalidad permitirá mayor celeridad en proyectos prioritarios, pero respetará “todas las fases del licenciamiento” para evitar un proceso simplificado.

Próximos pasos legislativos

El gobierno anunció que presentará al Congreso un nuevo proyecto de ley con carácter de urgencia para cubrir los vacíos regulatorios generados por los vetos.

La iniciativa buscará equilibrar el desarrollo de infraestructura con la protección ambiental, un tema clave para Brasil, país que acogerá la Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU (COP30).