Casi seis meses transcurrieron desde el inicio de la agresión de "Israel" contra la Franja de Gaza, más de 32 mil palestinos fueron asesinados por el régimen sionista y naciones del mundo pidieron un alto al fuego durante meses, pero Estados Unidos vetó las resoluciones hasta el 26 de marzo.

La administración de Joe Biden  envió  bombas y otro tipo de armamento a "Israel". El mandatario estadounidense  firmó una legislación que retira fondos a la agencia de la ONU que brinda ayuda y asistencia humanitaria a Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este.

La resolución de alto al fuego llegó demasiado tarde para miles de palestinos, incluidos más de 100 valientes periodistas asesinados por las fuerzas sionistas porque cubrían la matanza y otras conductas inhumanas de la maquinaria de guerra israelí.

La resolución no está marcando ninguna diferencia para los refugiados palestinos en Rafah que tienen frío, están sin hogar, hambrientos y enfermos por la guerra.

A juzgar por cómo se están comportando "Israel" y sus aliados (liderados por Estados Unidos, Reino Unido y Francia), es previsible que la maquinaria de guerra israelí intensifique su campaña genocida en Gaza cuando termine el Ramadán. Miles de hombres, mujeres y niños palestinos morirán.

A los que sobrevivan no se les permitirá regresar a sus hogares a menos y hasta que acepten la misma ocupación militar que "Israel" lleva a cabo en la Cisjordania ocupada.

Al primer ministro Benjamín Netanyahu y a su gabinete de guerra no les importa lo que el Consejo de Seguridad o cualquier otra persona en el mundo piense o diga sobre su genocidio en Gaza, la limpieza étnica, el robo de tierras, el apartheid en Cisjordania, y el apoyo flagrante a la violencia de los colonos contra  los palestinos.

No importa lo que diga Biden sobre el bombardeo israelí de vehículos de ayuda humanitaria y la matanza de trabajadores que entregaban alimentos a los palestinos hambrientos en Gaza (días después de la resolución de alto el fuego del Consejo de Seguridad).Netanyahu sabe que la “indignación” de Biden no tiene valor.

Lo que importa es que Estados Unidos e "Israel" se burlaron de la resolución de alto al fuego, y del propio Consejo de Seguridad, a menos que el mismo organismo les permita hacer lo que quieran, por las razones que elijan, con cualquiera que no sea los demás miembros permanentes del Consejo de Seguridad (China, Francia, Rusia y Reino Unido).

Los políticos y diplomáticos de "Israel" y Estados Unidos saben que el Consejo de Seguridad no sancionará a "Tel Aviv" por violar la resolución de alto el fuego. Tampoco sancionará a Estados Unidos por hacer alarde de la resolución enviando a su aliado armas adicionales y desfinanciando a la UNRWA para matar de hambre a palestinos indefensos, sin hogar, enfermos y hambrientos.

La dura verdad es que las Naciones Unidas siempre han sido un escenario para el alarde diplomático de las naciones privilegiadas, no un foro para la diplomacia, la justicia y la paz globales. La gente de naciones marginadas por el capitalismo imperial, el materialismo, la supremacía blanca, el fascismo y la hipocresía saben que este es el caso.

La ONU nunca sancionó a "Israel" por violar otras resoluciones relativas a violaciones contra los palestinos durante 75 años.