Asfixia y calor: el nuevo castigo para los prisioneros palestinos
Las altas temperaturas y la falta de ventilación generan en algunos recintos condiciones inhumanas, sobre todo en el desierto de Néguev.
El Centro Palestino de Estudios sobre Prisioneros denunció las difíciles condiciones en las cárceles de "Israel", sobre todo las del sur, pues la intensa ola de calor que azota la región convierte a esos recintos en algo así como hornos calientes.
"Las habitaciones donde sientan los presos están cerradas por todos lados y no entra aire en ellas. No hay dispositivos de ventilación apropiados en su interior y hay pocos ventiladores, lo cual aumenta el sufrimiento de los presos, especialmente con la alta humedad”, describió el reporte del Centro de Estudios.
Los prisioneros más expuestos a este castigo de calor están en los presidios del sur: Néguev, Rimon, Nafha y Eshel, ubicadas en el desierto del Néguev, donde las temperaturas y la humedad alcanzan niveles muy altos. Estas albergan a casi la mitad del número total de presos palestinos.
En su análisis, el director del centro e investigador, Riyad Al-Ashqar, advirtió sobre las repercusiones negativas para los presos de unas condiciones climáticas tan difíciles, y dijo temer que algunos de ellos sufrieran insolaciones o desmayos y dificultad para respirar a consecuencia de la temperatura y el aire caliente.
Según explicó, estas condiciones aumentan el peligro para la vida de los presos enfermos, y aumentan su sufrimiento, sobre todo ante la falta de atención médica real, y "la práctica de una política de negligencia médica y matanza lenta en su contra".
A la administración de prisiones de la ocupación no le importan tales circunstancias, aseveró el estudioso. De heho, un castigo habitual es confiscarles los ventiladores y evitar su ingreso a muchas secciones como medida punitiva.
De acuerdo con Al-Ashqar, las temperaturas en las cárceles ubicadas en el desierto del Néguev alcanzaron alrededor de los 50 grados centígrados, lo cual provocó un sufrimiento exacerbado para ellos.
El Centro Palestino hizo un llamado a las instituciones internacionales para su intervención a favor de los presos, y su protección en tan difíciles condiciones climáticas, que se suman a las prácticas arbitrarias de la ocupación contra los retenidos para aumentar su sufrimiento y quebrarlos.
El número de presos y detenidos palestinos en las prisiones de la ocupación es de unos cuatro mil 900, incluidas 34 prisioneras, según las instituciones que se ocupan de los asuntos de los presos.