Bashar Al-Assad: Occidente trabaja para crear terror en Siria
En declaraciones al sitio web Sky News Arabia, Al-Assad trató sobre la guerra, el terrorismo, el tema de las drogas, los refugiados y su retorno.
Occidente trabaja para crear un estado de terror en Siria, como mismo hizo en Libia e Irak, afirmó el mandatario sirio, Bashar Al-Assad.
En esas naciones el plan occidental no era derrocar a los presidentes Muammar Gaddafi y Saddam Hussein, respectivamente, sino apoderarse de los países. Ahora, no pretenden acabar con Bashar Al-Assad, sino con Siria, denunció el mandatario en declaraciones a la televisora Sky News Arabia.
En su intercambio, el jefe de Estado aseguró que la única manera de evitar la guerra era sometiéndose a las demandas impuestas por Occidente, pero ese precio es mucho más caro, lamentó.
Ocho años de constantes agresiones dejaron mucha destrucción en el país, pero Al-Assad resaltó la firmeza del pueblo sirio y la entereza de los amigos de esa nación para ayuudar en la recuperación.
En otro punto de su intervención, el jefe de Estado se refirió a la situación de los refugiados sirios y al regreso al país de medio millón de ellos en los últimos años.
No obstante, el flujo del retorno está actualmente detenido hasta crear las condiciones para garantizarles las condiciones de vida, precisó.
Paralelamente, Al-Assad desestimó la llamada Ley César impuesta por la administración estadounidense contra Siria, pues representa un obstáculo para el desarrollo de la economía nacional.
Sin embargo, aseguró, el mayor impedimento para desenvolvimiento futuro del país es la destrucción a la infraestructura del país, señaló el presidente.
En ese sentido, lamentó la imagen de guerra que proyecta Siria, la cual frena las inversiones extranjeras.
Sobre la tan anunciada reunión con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, el jefe de Estado sirio reafirmó su negativa al encuentro bajo las condiciones impuestas por Ankara.
Los diálogos entre Damasco y Washington se mantienen a pesar de la política estadounidense de exigen, tomar y no dar nada a cambio, reconoció el presidente.