Las posiciones antiraníes del Parlamento Europeo dañaron las relaciones de la República Islámica con la Unión Europea (UE) durante el pasado año, aseveró el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Nasser Kanaani.

Esos planteamientos son una continuación de una política errada, basada en hechos aislados y prejuicios hacia la sociedad y el pueblo iraní, e indican falta de comprensión para la resistencia y la racionalidad de la República Islámica, recalcó el funcionario.

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La aplicación de una infructuosa presión política y propagandística contra la lógica de la preparación para la interacción basada en el respeto mutuo y los intereses comunes, revela la frivolidad y la deshonestidad de algunos países europeos para con Irán.

De acuerdo con Kanaani, las  falsas acusaciones respecto a determinados ciudadanos extranjeros y prisioneros con acciones delictivas, construidas en base a documentos válidos, muestran la posición contra el pueblo y el gobierno por parte de algunos funcionarios de la Unión Europea.

Este enfoque está en clara contradicción con lo dicho por funcionarios de la UE sobre la interacción y el diálogo con Irán”, puntualizó además.

Según el portavoz, la nación iraní espera de la Unión una posición más firme, un rechazo a estos elementos y sus declaraciones poco constructivas e infundadas, pues resultan contrarias a los esfuerzos previstos para mantener una vía de comunicación.