Tribunal israelí no considera petición de libertad a preso palestino
La decisión de la Corte Suprema equivale a una sentencia de muerte contra el prisionero Kayed Al-Fasfous, y a una continuación del enfoque de dilación para ganar más tiempo para abordar las demandas de los prisioneros en huelga de hambre.
La Corte Suprema israelí en la Jerusalén ocupada no consideró la petición presentada para impugnar la detención administrativa contra el prisionero Kayed Al-Fasfous y decidió devolver el caso al Tribunal Militar de Ofer.
Según el Ministerio de Prisioneros y Exprisioneros Palestinos, la decisión equivale a una sentencia de muerte contra Al-Fasfous y a la continuación del enfoque de dilación para ganar más tiempo y abordar las demandas de los prisioneros en huelga de hambre.
La declaración también consideró la medida una completa connivencia con el servicio de inteligencia de la ocupación y una respuesta clara a sus dictados.
LEA TAMBIÉN: Tensión por traslado de prisioneros palestinos a cárcel de Nafha
Asimismo, responsabilizó a la ocupación y a la administración penitenciaria de las repercusiones del fallo.
Al-Fasfous (34 años), oriundo de la ciudad de Dura, al sur de Al Jalil, continúa su huelga de hambre abierta por 61 días consecutivos en rechazo al delito de su detención administrativa, en medio de grandes temores por su vida.
Hace unos días, el Club de Prisioneros Palestinos informó sobre el traslado de Al-Fasfous de las celdas de la prisión de Ashkelon a la clínica penitenciaria de Ramla por su grave estado de salud.
De acuerdo con la organización, las cortes israelíes son la principal herramienta en la consolidación del delito de la detención administrativa por medio de simulacros judiciales y la implementación de las decisiones de la inteligencia ocupante.
Al-Fasfous, casado y padre de un niño, fue arrestado el 2 de mayo de 2023, pasó siete años en las cárceles sionistas y enfrentó diversas detenciones desde 2007.
En 2021 mantuvo una huelga de hambre por 131 días ininterrumpidos por las razones actuales.
Hace unos días, las autoridades penitenciarias decidieron liberar a Hassan Muhammad Al-Fasfous, uno de los hermanos de Kayed, después de una detención administrativa de 16 meses.
La medida represiva es una forma de tortura psicológica y presión sobre los prisioneros. Las sesiones de juicio para ventilar estos caos son realizadas a puertas cerradas y privan al cautivo de su derecho a un juicio público.