Colombia instala mesa de negociaciones con antigua milicia armada
Gustavo Petro exigió “máxima responsabilidad” a miembros del grupo integrado por guerrilleros no acogidos al Acuerdo de Paz de 2016.
El Gobierno de Colombia y el Estado Mayor Central de las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias (EMC-FARC) instalaron una mesa de negociaciones para discutir y aprobar el cese al fuego bilateral y temporal en todo el territorio.
Ante el inminente escenario, el presidente colombiano, Gustavo Petro, exigió “máxima responsabilidad” a miembros del grupo armado, integrado por guerrilleros no acogidos al Acuerdo de Paz de 2016.
De acuerdo con lo programado, las delegaciones de paz inciciaron las reuniones en Tibú, Norte de Santander, para presentar el diálogo y concretar el fin del conflicto.
Ayer, el mandatario Petro hizo el llamado para sacar adelante este proceso que permitirá "bajar la intensidad a la lucha y disminuir las muertes".
“Está a punto la mesa que puede iniciar un segundo proceso de paz en Colombia. Espero de todos los combatientes del EMC la máxima responsabilidad con la tarea que se inicia”, pidió por medio de su cuenta de la red social X, antes Twitter.
Las dos delegaciones asistieron el pasado 8 de octubre en el Polideportivo de Tibú, pero ante la falta de consenso en algunos puntos acordaron aplazar el intercambio formal.