Cientos de fábricas vitales en "Israel" sufren escasez de mano de obra
La crisis de seguridad en los territorios ocupados, a raíz de la batalla palestina Diluvio de Al Aqsa, compromete la producción y suministro de alimentos, medicinas y otras mercancías básicas .
Cientos de fábricas vitales para el suministro de alimentos, medicinas y productos básicos para la población de "Israel" sufren una grave escasez de trabajadores, debido a los recientes acontecimientos asociados a la batalla Diluvio de Al Alqsa.
Días atrás, la revista estadounidense Foreign Policy valoró el riesgo para la entidad de ocupación de verse pronto sin alimentos para su propia población, como consecuencia colateral de la guerra en la Franja de Gaza.
También varios medios israelíes llamaron la atención sobre la falta de producción de alimentos en los campos, tras la partida de millares de trabajadores extranjeros, temerosos de los misiles de la resistencia palestina.
A su vez, el sitio israelí Canal 12 reflejó una encuesta realizada por el Sindicato de Industriales de la Ocupación, según la cual el 70 por ciento de las fábricas informaron de una "grave escasez de trabajadores" dos semanas y media después del inicio del ataque a Gaza.
Por su parte, el canal Kan advirtió sobre la reducción de los psicoterapeutas y trabajadores en las instalaciones agrícolas del sur, pues cerca de cuatro mil extranjeros a cargo de esas labores habían abandonado "Israel".
Los medios de comunicación israelíes informaron que el sector agrícola de la ocupación resultó dañado muy grave durante el ataque de Hamas a los asentamientos de la “envoltura de Gaza”, y señalaron que fue testigo de una escasez de mano de obra.
El sitio israelí 0404 divulgó que el Ministro del Interior, Moshe Erbil, ordenó a la Autoridad de Población e Inmigración trabajar con urgencia para traer trabajadores extranjeros al sector agrícola, de nuevos países de los que hasta ahora no se han importado trabajadores.
Al mismo tiempo, el titular señaló cuantiosos daños a los campos agrícolas y apuntó que para restaurar la agricultura será necesario incorporar un gran número de trabajadores de otras naciones vecinas.