Revelan intento de "Israel" de atacar a Hizbullah de Líbano
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, disuadió al primer ministro de "Israel", Benjamín Netanyahu, de ejecutar el ataque, pues podría incluso desencadenar una guerra regional más amplia.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instó al primer ministro de "Israel", Benjamín Netanyahu, a frenar un ataque preventivo contra Hizbullah de Líbano, cuatro días después del golpe sorpresivo del movimiento palestino Hamas a los asentamientos sionistas en la frontera con la Franja de Gaza.
Según reveló el periódico estadounidense The Wall Street Journal, aviones de combate israelíes ya estaban en el aire, “esperando órdenes”, cuando Biden habló con Netanyahu el 11 de octubre y pidió pensar en las consecuencias de esa acción, que podría incluso desencadenar una guerra regional más amplia.
La Casa Blanca recibió la primera indicación de los “planes israelitas de lanzar su ataque ese miércoles alrededor de las 06:30, hora local, precisó el medio.
De acuerdo con lo publicado, el mensaje del gabinete sionista informaba sobre supuestos preparativos de la Resistencia libanesa para atacar los territorios palestinos ocupados, y Netanyahu pedía ayuda a Biden porque sus tropas solas no podrían vencer en ese nuevo escenario.
"Israel" tenía información de inteligencia, que Washington consideraba poco confiable, acerca de agentes de Hizbullah dispuestos a cruzar la frontera como parte de un ataque en múltiples frentes, una certeza que llevó al borde del abismo a algunos de los funcionarios israelíes más conservadores, aseguró el diario.
El rotativo indicó que unas horas más tarde, los principales asesores de Biden se reunieron para discutir los planes propuestos por su aliado en Medio Oriente y decidieron que la inteligencia estadounidense no era compatible con los proyectos israelíes.
Biden sostuvo entonces una llamada con Netanyahu, quien no estaba convencido por completo del ataque, y con miembros de su gabinete de guerra, refirió.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Galant, era partidario entonces de atacar a Líbano, pues consideraba inevitable una guerra más amplia en la región y quería anticiparse a la acción.
Después de 45 minutos de discusión, “Netanyahu finalizó la llamada diciendo que discutiría el asunto con su gobierno”, manifestaron funcionarios estadounidenses.
Mientras transcurrían tales conversaciones, el norte de la Palestina ocupada estaba en alerta, pues los soldados israelíes en la frontera recibieron órdenes urgentes de sus comandantes de estar preparados para luchar.
En cuanto a la población civil, "Israel" envió una advertencia a todos sus colonos en la zona para trasladarla de inmediato hacia los refugios.
Como reconocieron luego representantes estadounidenses e israelíes, todo era una falsa alarma, pero una serie de incidentes posteriores alimentaron sus temores de otro ataque.
Fueron necesarias unas seis horas de llamadas y reuniones para que los funcionarios israelíes aceptaran dar marcha atrás, pues Estados Unidos insistía en que sus servicios de inteligencia no indicaban un ataque inminente de Hizbullah, agregó el periódico.
En este contexto, el periodista israelí del sitio web estadounidense Axios, Barak Ravid, comentó el informe citado por The Wall Street Journal y aclaró que en verdad los estadounidenses se opusieron al ataque, pero “no fueron el factor decisivo en la toma de decisiones".
A juicio de Ravid, Netanyahu no quería atacar a Líbano y Biden no lo convenció de no hacerlo, pues la idea de Gallant y el jefe de Estado Mayor era atacar a la Rresistencia libanesa al comienzo de la guerra contra Gaza.
El medio añadió que Netanyahu eludió por horas las llamadas de Gallant el 11 de octubre porque no quería atacar Líbano y cerró el acuerdo con Benny Gantz para unirse al gobierno de emergencia.
En valoración de Ravid, cuando se formó esa noche el gobierno de guerra, Netanyahu se sintió más seguro con la presencia de dos ex jefes de estado mayor a su lado, Gantz y Eisenkot, quienes se opusieron al ataque al Líbano y rechazaron la iniciativa de Galant y el jefe de Estado Mayor, Herzi Halevy.
Respecto a la veracidad del informe difundido por The Wall Street Journal, la Oficina del primer ministro israelí negó sus términos, y aseguró que “Netanyahu ya había decidido desde el primer día de la guerra que procuraría una victoria en el sur con disuasión ofensiva en el norte”.
La oficina ministerial validó la discusión sobre el ataque repentino contra Hizbullah en el Líbano, asunto presentado al titular de Seguridad, quien apoyó tal medida, aunque otros integrantes del gabinete estuvieron en contra.
El canal 13 israelí divulgó que las discusiones sobre esta posibilidad se volvieron serias, tras la conversación telefónica entre Biden y Netanyahu, pero “no había aviones en el aire durante la llamada”.
Antes del referido diálogo, la reunión del gabinete involucró a varios funcionarios sionistas con figuras norteamericanas como el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin.