Pájaro del sol, el ave de la identidad de Palestina
Los nacidos en Palestina atesoran en su memoria a esta especie, avistada por primera vez en el país en 1868 y declarada Ave Nacional en 2015.
El pájaro del sol vuela sobre la flor de iris, lo hace rapidísimo, va vertical, evadiendo bombas. Parece un detalle mínimo. Es más, lo es. Es un detalle mínimo que la gente suele recordar cuando algo tan pequeño les da esperanza.
Los nacidos en Palestina atesoran en su memoria a esta especie, avistada por primera vez en el país en 1868 y declarada Ave Nacional en 2015.
Cada ejemplar, de entre 10-11 centímetros, es uno de los más pequeños de la región del Levante y comparte similitudes en forma y estilo con el colibrí.
Al mirar al género masculino, destaca la tonalidad metálica, clara, atrevida, en especial en la cabeza, la espalada, y el abdomen.
Mientras, las hembras presentan un color gris y una cola negra que les ayuda a mantener el camuflaje en su entorno.
De manera casi mágica, poseen dialectos distintos que cambian de una región a otra e incluso entre barrios de la misma ciudad.
En total, son más de 500 variedades, incluidas 206 generaciones y clasificaciones de residentes, visitantes de verano y de invierno.
Pero, como con casi todo en estas tierras, “Israel” realizó intentos de robar y cambiar el nombre del animal para redefinir su identidad.
No obstante, es imposible no mirar a estas aves y no recordar a los legítimos herederos de esas tierras, sus paisajes y sus flores.