Medios israelíes apodan a Netanyahu como el "señor de los fracasos"
Un sondeo reveló que la mayoría de los israelíes perdieron la confianza en el gobierno de Netanyahu y el 69 por ciento de los colonos apoya la celebración de nuevas elecciones inmediatamente después del cese de la guerra en Gaza.
Como el "señor de los multifracasos", describieron al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, los propios medios de la entidad sionista, en el contexto de los primeros 100 días de guerra contra la Franja de Gaza.
La presnsa israelí criticó los fracasos de Netanyahu en los ámbitos de seguridad, diplomacia y economía.
El periódico Haaretz afirmó que después de estos largos días de combate, la prioridad del gobierno debería ser el regreso de los prisioneros, incluso a expensas de un alto al fuego, la liberación de miles de palestinos o la "eliminación de Hamas".
Haaretz enfatizó en el incumplimiento de los objetivos de guerra planteados por el régimen sionista.
Al mismo tiempo, recalcó que cambiar las terminologías en los medios de comunicación no cambia esta realidad, en referencia a la sustitución del término "eliminar a Hamas" por "desarme de Gaza".
El diario atribuyó esta situación a la actuación del jefe de personal y sus subordinados, atrapados entre las tenazas de políticas fallidas y una línea de crédito internacional en declive.
De acuerdo con la piblicación, las metas de la guerra no se pueden lograr completamente sin el respaldo popular interno y el crédito diplomático internacional, en medio de un "gobierno impotente y un presidente fallido y tramposo".
También destacó que en los primeros 100 días, el horizonte militar sigue siendo incierto, al igual que el político.
La encuesta publicada por el periódico Maariv mostró que solo el nueve por ciento de los colonos cree que "Israel" logrará un éxito o ganará en su guerra contra Gaza.
Además, el 69 por ciento de los colonos apoya la celebración de nuevas elecciones inmediatamente después del cese del ataque a la Franja.
Otro sondeo reveló que la mayoría de los israelíes perdieron la confianza en el gobierno de Netanyahu, con crecientes críticas y desacuerdos entre los miembros de su gabinete.