La directora de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Samantha Power, enfrentó críticas de sus empleados por el apoyo de la administración del presidente Joe Biden a la agresión israelí en Gaza.

Según el periódico The Washington Post, la renombrada investigadora en genocidio, Agnieszka Saykes, quien renunció a su cargo en la USAID la semana pasada, instó a Power a abandonar el gobierno debido a la complicidad de las autoridades de la Casa Blanca con los crímenes contra el pueblo palestino.

Con anterioridad, Saykes interrumpió un discurso de Power en Washington sobre cambio climático y desastres naturales para destacar el libro de la propia oradora titulado "La solución del infierno", una condena a la inacción de Estados Unidos ante numerosas atrocidades, desde Armenia hasta Ruanda, durante varias administraciones presidenciales.

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"Has escrito un libro sobre genocidio y aún trabajas en la administración, deberías renunciar y hablar en público", dijo Saykes a Power.

De acuerdo con el medio, la confrontación pública de Power con los empleados es un reflejo de lo expresado por los funcionarios de la USAID sobre su trabajo a largo plazo en este tema y la responsabilidad de la agencia en responder a la angustia de los habitantes de Gaza debido a la falta de alimentos, agua y medicamentos, en medio del devastador bombardeo israelí.

Este episodio ocurrió en un momento en que crece el apoyo interno a Palestina en EE. UU. y aumenta la división política respecto al apoyo militar a “Israel” y el genocidio en curso.

Los medios estadounidenses informaron sobre la decisión de concejo municipal de Chicago a adoptar una resolución en favor del alto al fuego inmediato en Gaza.

Al menos 50 ciudades norteamericanas emitieron resoluciones similares, reportó el sitio web de Sky News.