El Ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Hossein Amir Abdullahian, dialogó en Beirut, capital de Líbano, con varios líderes de las facciones palestinas, revelaron fuentes bien informadas  a Al Mayadeen.

La delegación palestina incluyó al jefe de la Yihad, Ziad al-Nakhalleh, al dirigente de Hamas de Líbano, Osama Hamdan, y al secretario general adjunto del Frente Popular para la Liberación de Palestina, Jamil Mezher.

Al encuentro también asistieron el titular adjunto de Asuntos Exteriores de Irán para Asuntos de Asia Occidental y el Norte de África, Mehdi Shushtari, y el embajador de Irán en Líbano, Mojtaba Amani.

Esta reunión inició con una explicación de Al-Nakhalleh sobre la situación en  la Franja de Gaza y la legendaria firmeza de la Resistencia y el pueblo palestinos, además de destacar los "signos de victoria en el horizonte basados en esta firmeza”.

Según Al-Nakhalleh, el tiempo está del lado de la Resistencia, pues quien está bajo presión interna e internacional es el enemigo israelí, por no lograr ninguno de sus objetivos y cometer crímenes de guerra.

También expresó su aprecio por el papel de Irán y el eje de resistencia en la Batalla del Diluvio de Al-Aqsa, recalcando “la importancia de la unidad de las filas palestinas para conseguir los mayores logros posibles en esta batalla”.

El líder de la Yihad subrayó la necesidad de estar preparados para la fase posterior a la victoria, a fin de abordar los problemas para el pueblo gazatí como consecuencia de esta guerra.

Por su parte, Osama Hamdan agradeció los esfuerzos del ministro Amir Abdullahian, y del gobierno de Irán, y los felicitó por el aniversario 45 de la victoria de la Revolución Islámica.

En ese sentido, recordó cuánta presión y asedio soportó el puebli iraní hace cuatro décadas mientras luchaba para sobrevivir.

Pero hoy la entidad sionista es quien lucha por su supervivencia, aseveró.

A criterio de Hamdan, la batalla Diluvio de Al-Aqsa alertó al mundo de que no habrá estabilidad ni calma en la región sin poner fin a la ocupación israelí en Palestina, pues la guerra en curso demostró la falta de sentido de seguir el camino de las negociaciones, cuando el único beneficio esperable viene de multiplicar la resistencia.

Si el enemigo no rechazó de manera oficial la respuesta de Hamas al Documento de París, a pesar de las declaraciones contrarias de Netanyahu y su fracaso al enviar un enviado a las negociaciones en El Cairo, significa que no está dispuesto a ignorarlo por completo, reflexionó el representante de Hamas.

Como lo interpreta este movimiento es un intento de presionar, a través del Papel de Rafah, para lograr avances en las negociaciones favorables a sus intereses.

En cuanto a la ausencia del tema del "día siguiente del fin de la guerra" en el Documento de París, puntualizó: "el enemigo no habla de ello porque su objetivo principal es recuperar a los prisioneros en manos de la Resistencia, y los movimientos tampoco lo abordan porque ese es un asunto interno palestino".

Por su parte, el canciller iraní expresó su agradecimiento a los líderes de las facciones por su presencia en la cita,  pues para Teherán estaba claro, sobre todo en las últimas dos semanas, que los políticos estadounidenses están desesperados por ayudar a la entidad israelí a ganar esta guerra.

Amir Abdullahian destacó la unidad de la posición palestina y la importancia de apoyar a las facciones, y en particular al movimiento Hamas.

Según valoró en rueda de prensa ofrecida desde el aeropuerto de Beirut a su llegada a Líbano, “Tel Aviv" no logró ninguno de sus objetivos en estos cuatro meses de genocidio, tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania.

En su criterio, el apoyo norteamericano a “Israel” sólo traerá fracasos a Washington, a quien la entidad sionista busca hundir en el atolladero de la guerra en Medio Oriente.