Los ministros de Relaciones Exteriores del Grupo de los siete países más industrializados del mundo (G7) expresaron su preocupación por el riesgo de desplazamiento forzado de civiles palestinos de la Franja de Gaza y las posibles consecuencias del lanzamiento de una operación militar de "Israel" en Rafah.

El representante de Italia, país a cargo de la presidencia del G7 en este período, comunicó el pedido de medidas urgentes para afrontar la catastrófica crisis humanitaria en Gaza y frenar el sufrimiento de 1,5 millones de civiles refugiados en la pequeña ciudad sureña.

También expresaron su profunda preocupación por las posibles consecuencias devastadoras para esa población de otra operación militar "integral" en la región.

Por esas razones, manifestaron la disposición del grupo de apoyar a la Autoridad Palestina para llevar a cabo reformas necesarias y asumir responsabilidades en Gaza y Cisjordania.

A la reunión de este sábado en la ciudad alemana de Múnich asistieron los cancilleres de Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón y Estados Unidos.