Demócratas en EE. UU. serán hostiles con primer ministro de “Israel”
Además de boicotear el discurso ante el Congreso estadounidense, manejan otras opciones para hacerle ver su descontento con el esfuerzo bélico y liderazgo de Benjamín Netanyahu.
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Primer ministro de “Israel”, Benjamín Netanyahu.
Los representantes demócratas en el Congreso de Estados Unidos valoran una amplia gama de opciones para afrontar el discurso del primer ministro de “Israel”, Benjamín Netanyahu, invitado a ese foro para el próximo mes.
Según fuentes citadas por el sitio web estadounidense Axios, los demócratas planean enviar una fuerte señal de descontento con el esfuerzo bélico israelí, y con el liderazgo de Netanyahu en particular.
Las sugerencias incluyen una conferencia de prensa, una protesta popular e incluso organizar un evento con las familias de los prisioneros, muchos de los cuales sienten que Netanyahu no hizo lo suficiente para liberar a sus hijos.
De acuerdo con una de las fuentes de Axios, algunos representantes demócratas hablan de frustración porque la visita de Netanyahu socava el trabajo de la administración de Joe Biden y no respeta la voluntad de los ciudadanos israelíes, quienes piden en mayoría la dimisión del jefe de Gobierno.
Un legislador comentó al medio las intenciones de varios demócratas de la Cámara de Representantes de asistir al discurso del invitado, pero para interrumpirlo.
El sitio se detuvo ante las duras críticas dirigidas por los demócratas a la entidad sionista, aunque inicialmente apoyaron sus intervenciones en Gaza de los últimos meses.
De igual modo, el pasado martes Axios reveló una división dentro del grupo de los demócratas del Senado, entre quienes apoyan la imposición de sanciones a la Corte Penal Internacional por solicitar una orden de arresto contra Netanyahu, y quienes están preocupados por dañar las relaciones de Estados Unidos con ese órgano a largo plazo.
A juicio del este sitio web, las conversaciones sobre este asunto entre los partidos Demócrata y Republicano llegaron a un callejón sin salida, y determinar la fuerza de la respuesta a la decisión del tribunal devino tema “políticamente espinoso” antes de las elecciones de finales de este año.
