El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, acusó a los líderes de la seguridad y las fuerzas armadas de imponerle el plan del presidente estadounidense Joe Biden para un acuerdo de alto al fuego con el movimiento palestino Hamas.

Un funcionario de seguridad israelí dijo al Canal 13 que la situación del acuerdo es sombría y añadió que Netanyahu impone condiciones que Hamas no aceptará, como la presencia de los militares sionistas en el corredor de Netzarim para evitar el retorno de los combatientes palestinos.

Por primera vez, funcionarios del “ejército” israelí, el Shin Bet y el Mossad advirtieron que el enfrentamiento personal y político entre Netanyahu y el ministro de Seguridad (Guerra), Yoav Galant, daña la gestión de la ofensiva.

Según fuentes de las instituciones militar y de seguridad, Netanyahu y Galant no se comunican fuera de las discusiones oficiales.

Otros informes aseguraron que una de las razones por las que “Israel” no llegó a una decisión sobre la cuestión de la posguerra es la falta de disposición del primer ministro a aceptar el plan de su aliado, a pesar de diferir mucho del suyo.

De acuerdo con el Canal 12, la razón del tono severo entre el jefe del gobierno ocupante y altos funcionarios del partido Likud es su intención de destituir a Galant lo antes posible.

El conflicto se intensificó a principios de julio cuando la prensa filtró que Netanyahu impidió a Galant celebrar una reunión sobre el acuerdo de intercambio de prisioneros con los jefes del Mossad y el Shin Bet sin su presencia.