Un jurado federal del estado de Virginia, Estados Unidos, declaró responsable a la contratista militar CACI Premier Technology de las torturas sufridas por tres reclusos en la prisión de Abu Ghraib durante la ocupación de Irak a principios de la década de 2000. 

El veredicto histórico ocurrió después de 16 años de litigio y fue la primera vez que una empresa civil estadounidense es declarada de manera legal culpable de los horripilantes actos de violencia perpetrados en la referida cárcel.

Como parte de las violaciones fueron notificados asesinatos, agresiones sexuales y violaciones, uso de perros de ataque, privación del sueño, aislamiento prolongado, restricción de alimentos, hipotermia inducida, simulacros de ejecuciones y humillación de prisioneros. 

La víspera, el abogado de la organización Centro de Derechos Constitucionales Baher Azmy, quien representa a los demandantes, destacó la importancia del fallo.

Según Azmy, a cada demandante le otorgaron tres millones de dólares por concepto de daños compensatorios y once millones en daños punitivos.

Conforme a expertos, la decisión envió un fuerte mensaje de que este tipo de infracción, negligencia, imprudencia y desviación corporativa es indignante y merece ser sancionada.