Al Mayadeen obtuvo una copia de la resolución de la AIEA contra Irán
La resolución pretende ser un nuevo impulso a los esfuerzos actuales por aplicar el acuerdo de salvaguardias nucleares en la República Islámica, pero es en verdad una manipulación política y prueba de la falta de fe en Teherán, puntualizó la cancillería.
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Instalaciones nucleares iraníes
La red Al Mayadeen obtuvo una copia del proyecto de resolución presentado por Francia, Reino Unido, Alemania y Estados Unidos contra Irán en la Agencia Internacional de Energía Atómica, basado en una supuesta falta de compromiso de Teherán con los acuerdos previos en cuanto a la información solicitada sobre sus actividades nucleares, según los verificadores.
Con este documento intentan forzar a la República Islámica a suministrar más datos y acceso pleno a sus instalaciones del programa nuclear, como condicionante para declarar no más cuestiones pendientes por parte del organismo y no "tomar medidas" en el Consejo.
El texto del proyecto inicia con un elogio a los "continuos esfuerzos profesionales, independientes e imparciales" del Director General de la Agencia Internacional de Energía Atómica, y de la Secretaría, para implementar el acuerdo de salvaguardias previsto en el Tratado sobre la no proliferación de las armas nucleares con Irán.
Luego hace referencia a "profundas preocupaciones" del director, Rafael Mariano Grossi, por la presencia de material nuclear no declarado en varios lugares de Irán, cuyas ubicaciones actuales el Organismo desconoce, asegura el directivo, lo cual hace imposible la verificación del respeto iraní a sus compromisos legales al respecto.
Según sus argumentos, Irán incumplió parte de las obligaciones jurídicas aceptadas en 2003, al no proporcionar al Organismo información sobre el diseño de las instalaciones nucleares nuevas y previstas, ni aclarar el destino de cierta cantidad de uranio empleado en sus experimentos, y de los equipos contaminados.
Citó además otras resoluciones de la Junta de Gobernadores, entre el año 2020 y junio del 2024, donde se insta a Teherán a cooperar a plenitud para garantizar la información pactada, y dar "explicaciones técnicamente creíbles sobre la presencia de partículas de uranio de origen humano en dos lugares no declarados", un reclamo reiterado en esta tentativa.
Como reconoce la resolución, la agencia decidió no cambiar su evaluación sobre la inocuidad de las actividades nucleares iraníes, a pesar de las declaraciones recibidas, y por tanto el Organismo no aceptó ser garante del exclusivo uso pacífico del programa nuclear de la República Islámica.
Menciona además las visitas del Director General, y las reuniones de alto nivel en Teherán (la última este 14 de noviembre), para buscar avances en la resolución de las cuestiones pendientes, a la luz de la declaración conjunta entre la Agencia e Irán del 4 de marzo de 2023.
La resolución pretende ser un nuevo impulso a los esfuerzos actuales por aplicar el acuerdo de salvaguardias nucleares, pendientes desde 2019, "con graves consecuencias para la capacidad del Organismo" de garantizar la verificación del material nuclear, y dar fe de que no se desvió hacia la producción de armas nucleares u otros dispositivos explosivos.
Con precisiones como "urgente" y "sin demora", el proyecto exige a Irán la implementación del artículo 3.1 enmendado del tratado, visto como una obligación legal, y de proporcionar al Organismo toda la información preliminar y de diseño necesaria.
En consonancia, reclama acceso a más documentos, a los sitios y materiales solicitados, y permiso para realizar "el muestreo que la Agencia considere apropiado", de conformidad con el Tratado de No Proliferación Nuclear de Irán.
Por último, solicita al Director General una nueva evaluación completa y actualizada de la posible presencia o uso de material nuclear no declarado, y de de la conducta iraní (si hubo cooperación en estas cuestiones), para retomar el tema en la primavera de 2025, a más tardar.
Por su parte, el ministro adjunto de Asuntos Exteriores y Asuntos Jurídicos e Internacionales de Irán, Kazem Gharibabadi, ratificó que su país responderá de manera decisiva e inmediata si este proyecto es aprobado por la Junta de Gobernadores de la Agencia de Energía Atómica.
La Agencia Iraní de Energía Atómica está dispuesta a implementar la resolución en el momento de su aprobación, y esta acción será, de hecho, una respuesta al enfoque no constructivo de estos países y a la falta de interés en la buena fe de Teherán, insistió el diplomático.
