Exministro israelí Gallant rechaza imponer régimen militar en Gaza
El precio de la medida lo pagarán los soldados con su sangre y la mala disposición de prioridades conducirá al abandono de tareas de seguridad más importantes, señaló el exministro israelí de Defensa (Guerra), Yoav Gallant.
El exministro de Defensa (Guerra) israelí, Yoav Galant, criticó los esfuerzos del gobierno de ocupación por imponer un régimen militar en Gaza al buscar la ayuda de empresas privadas estadounidenses para supervisar la distribución de asistencia en el enclave bajo el monitoreo del ejército.
A juicio de Gallant, el precio de la medida lo pagarán los soldados con su sangre y la mala disposición de prioridades conducirá al abandono de tareas de seguridad más importantes.
El extitular consideró la necesidad de preparar una entidad alternativa para reemplazar al ejército israelí en el control de la región porque establecer gobierno militar en Gaza no forma parte de los objetivos de la guerra, sino más bien un acto político peligroso e irresponsable.
Las palabras de Galant provocaron respuestas de los ministros del gobierno de ocupación, encabezados por el de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, quien reconoció la no equivocación del primer ministro Benjamín Netanyahu al despedir al homólogo de Defensa.
En su opinión, el control por parte del ejército israelí de la ayuda a los residentes de Gaza es necesario para desmantelar a Hamas y arrebatarle el último bastión en la Franja.
Para el titular de Finanzas, Bezalel Smotrich, Galant imaginó la existencia de una entidad alternativa para hacer el trabajo israelí y de hecho impidió la responsabilidad de distribuir la ayuda y permitió a Hamas controlar la asistencia y mantener su dominio en la Franja, y ello condujo a la continuación de la guerra, el aumento de los costos y el sufrimiento de los prisioneros y sus familias.
El ministro de “la diáspora” israelí, Amihai Shikli, consideró a Galant un político peligroso e irresponsable, cuyo comportamiento impidió a la institución de seguridad y el ejército israelí encontrar alternativas para la distribución de la ayuda, y en su lugar trabajó para permitir el flujo de suministros para Hamas, una locura sin precedentes.
Netanyahu y el nuevo ministro de Defensa, Yisrael Katz, discutieron con especialistas un plan para traer una empresa de seguridad privada estadounidense a Gaza, sin indicar su identidad, para asumir la responsabilidad del lado civil y distribuir auxilio bajo la cobertura de la seguridad israelí.
Los diarios The Wall Street Journal y Financial Times informaron de la existencia de un procedimiento israelí conocido como Plan Burbuja para gestionar diferentes zonas de Gaza libres del control de Hamas tras el fin de la guerra de exterminio.
Como parte de su deliberada aniquilación de Gaza, “Israel” insistió en negar a cualquier parte palestina a asumir la responsabilidad de distribuir ayuda humanitaria y también prohibió el trabajo de la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina, prevista para tales asuntos.
Los palestinos de Gaza sufren una política deliberada de hambruna debido a la obstrucción por parte de “Israel” de la entrada de socorro, confirmaron varias instituciones internacionales y de la ONU.
Con el apoyo de Estados Unidos, “Israel” comete genocidio en Gaza desde el 7 de octubre de 2023 con un saldo de más de 148 mil mártires y heridos, en su mayoría mujeres y niños, en uno de los peores desastres humanitarios del mundo.