Sistema de misiles Oreshnik podría desplegarse en Bielorrusia en 2025
Tras el emplazamiento de los misiles estadounidenses Atakms en Ucrania, Bielorrusia decidió desplegar el sistema ruso en su capital, Minsk.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, informó este viernes la posibilidad de desplegar complejos de misiles Oreshnik en Bielorrusia en la segunda mitad de 2025.
Putin señaló la necesidad de resolver una serie de cuestiones técnicas, incluida la determinación del alcance mínimo, en tanto la prioridad es garantizar la seguridad de la República de Bielorrusia, antes de desplegarlos.
Además, la dirección militar y política de Minsk decidirá los objetivos de esos misiles contra cualquier potencial enemigo.
En una reunión del Consejo de Estado Supremo del Estado de la Unión de Rusia y Bielorrusia, en Minsk, Putin explicó que el tratado sobre garantías de seguridad entre los dos países define obligaciones mutuas para garantizar la defensa y proteger la soberanía.
Para ello se utilizarán todas las fuerzas y medios disponibles, incluidas las armas nucleares tácticas rusas, haciendo hincapié en la construcción de relaciones entre ambos países “sobre los principios de amistad y consideración de intereses mutuos”.
"Realmente Rusia y Bielorrusia se apoyan mutuamente en el escenario mundial, a pesar de las presiones externas", remarcó.
En este contexto, el ministro de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, indicó este viernes que Rusia no quiere empeorar la situación, “pero al permitir el uso del sistema Atakms y otras armas de largo alcance en toda Rusia, hemos enviado señales para tener en cuenta el nuevo sistema Oreshnik”.
A principios de noviembre, el presidente ruso señaló que las acciones ucranianas no pueden afectar el curso de la operación militar especial, pues las fuerzas rusas avanzan con éxito a lo largo de toda la línea de combate, además de haber obtenido muy buen resultado en la prueba del último avión de tamaño mediano cuyo misil es un modelo Oreshnik.
Los modernos sistemas de defensa antiaérea occidental no pueden interceptar los misiles Oreshnik, resaltó, porque sorprenden a los objetivos a una velocidad de Mach 10, es decir, entre 2,5 y tres kilómetros por segundo.