“Israel” afronta entorno de seguridad cambiado, afirma Jerusalem Post
Los medios israelíes leen el escenario sirio y sus desafíos tras la caída del gobierno de Bashar al-Assad y la toma del poder por el grupo armado Hay'at Tahrir al-Sham.
"Israel" enfrenta un entorno de seguridad profundamente cambiado. La desaparición de un adversario de largo plazo como el gobierno de Bashar al-Assad proporciona un breve respiro, pero el ascenso del grupo armado Hay'at Tahrir al-Sham cerca de la frontera norte presagia peligro, indicó un artículo publicado en el diario Jerusalem Post.
Según la publicación, ante la falta de perspectivas de ayuda occidental para la reconstrucción de Siria debido a sus credenciales extremistas, el grupo rebelde podría consolidar su poder a través del extremismo y amenazar abiertamente a “Israel” y Arabia Saudita y colocarlos en la situación de riesgo.
En cuanto a la posición de Rusia sobre los acontecimientos, el periódico preguntó si Moscú abandonará sus instalaciones en Tartous.
Conforme al medio, tal retirada afectaría el prestigio y la influencia del presidente de Vladimir Putin, al parecer obligado a retirarse por un grupo mucho menos equipado que las fuerzas ucranianas respaldadas por Occidente.
La pérdida del punto de apoyo sirio socava el despliegue de poder ruso, no sólo en Medio Oriente sino también en África, apuntó.
Para Jerusalem Post, el campo de batalla en Siria quedó dividido en agendas en competencia.
Las Fuerzas Democráticas Sirias ven una oportunidad de fortalecer la autonomía, pero están amenazadas por Turquía y sus representantes del Ejército Nacional Sirio.
Mientras tanto, Ankara está decidida a impedir la autonomía kurda. Todo ello podría profundizar su participación a riesgo de costosos enredos y tensiones tanto con "Israel" como con Washington.
Al mismo tiempo, subrayó el rotativo israelí, persisten restos de grupos de resistencia respaldadas por Irán, lo cual garantiza la supervivencia de Teherán, una amenaza potencial para la entidad sionista.
Por su lado, las facciones terroristas buscan explotar las porosas fronteras de Siria, y Jordania pronto podría enfrentar un escenario en el cual sus intentos de apaciguar a los actores extremistas sólo los alienten a medida que la apuesta del reino con la Hermandad Musulmana y el movimiento de resistencia palestino Hamas es cada vez más riesgosa.
A juicio del rotativo, el colapso de Siria también repercute en los países vecinos. Líbano enfrenta una mayor desestabilización con la disminución de la influencia de Teherán y sin el apoyo sirio confiable, mientras Hizbullah puede reforzar su control sobre la política libanesa y exacerbar la crisis.