Ataque con drones apunta contra la ciudad de Kazán, en Rusia
Ocho drones alcanzaron la ciudad de Kazán. Seis impactaron en edificios residenciales, uno tuvo como objetivo una instalación industrial y otro fue derribado sobre un río.
Rusia denunció este sábado un ataque masivo con drones ucranianos en la ciudad de Kazán, en la región de Tartaristán.
Según el servicio de prensa del gobernador de Tartaristán, Rustam Minnikhanov, ocho drones alcanzaron la ciudad. Seis impactaron en edificios residenciales, uno tuvo como objetivo una instalación industrial y otro fue derribado sobre un río.
De acuerdo a los datos preliminares del cuartel operativo desplagado en respuesta a la emergencia, los ataques con vehículos no triupalados no causaron víctimas entre los residentes.
"Mientras que antes atacaba a empresas industriales, el enemigo ataca ahora a civiles, por la mañana, justo en sus casas", escribió Minnijánov en su cuenta de Telegram.
La alcaldía de Kazán confirmó la evacuación de los ciudadanos, la habilitación de alojamientos provisionales y de otros insumos básicos.
También anunció la cancelación de eventos públicos durante los próximos dos días para garantizar la seguridad y el cierre temporal del aeropuerto de la ciudad para la salida y el aterrizaje de aviones.
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, expresó que "Kiev descarga contra la población civil rusa su rabia impotente por las derrotas militares".
"El ataque contra la capital de Tatarstán es también una especie de venganza por el éxito de la cumbre de los BRICS, celebrada allí en octubre de este año, que demostró el poder y la influencia de esta asociación en el mundo", dijo.
Asimismo, Zajárova se refirió al indignante "silencio demostrativo e hipócrita del Occidente colectivo y de sus medios de comunicación, que reaccionan inmediatamente ante cualquier brote extremista, por no hablar de los atentados terroristas en diversas partes del mundo, pero que, en el caso de Rusia, fingen que no pasa nada".
Durante la jornada del viernes, otro ataque ucraniano lanzado con misiles estadounidenses contra la localidad de Rylsk, en la región fronteriza de Kursk, dejó cinco fallecidos.
El gobernador de la provincia de Kursk en funciones, Alexánder Jinshtéin, informó que resultaron dañadas siete instalaciones de infraestructura social, entre ellas una casa de cultura, edificios de colegios y escuelas, un edificio residencial educativo, un centro deportivo y un complejo hotelero.