Un total de 34 palestinos resultaron mártires desde la madrugada del martes en ataques aéreos israelíes contra diversas zonas de la Franja de Gaza, según el corresponsal de Al Mayadeen.

El representante palestino ante Naciones Unidas, Riyad Mansour, instó a la comunidad internacional a presionar a "Israel" para el cese de sus crímenes.

Durante su discurso ante el Consejo de Seguridad, Mansour destacó que el pueblo palestino sufre asesinatos y hambre a diario, con un 70 por ciento de las víctimas entre mujeres y niños.

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También abogó por medidas urgentes contra el colonialismo de asentamiento, la anexión y el desplazamiento forzado, así como el fin a la presencia ilegal israelí en el territorio palestino ocupado, de conformidad con la opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia.

Mansour pidió apoyo para el gobierno palestino que, según sus declaraciones, demuestra un claro compromiso con la reforma y la paz.

Asimismo, exhortó a un respaldo político y financiero del plan de reconstrucción árabe y el apoyo continuo a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA).

El representante trasladó su temor de que el mundo se acostumbre a estas atrocidades, enfatizando que lo sucedido en el enclave no es una guerra, sino crueldad, como lo describió el papa Francisco.

Los acontecimientos se producen en medio de una continua escalada israelí sobre la Franja de Gaza, donde diversas zonas son objeto de bombardeos aéreos, terrestres y marítimos, lo que aumenta el sufrimiento de la población civil y amenaza con más víctimas y destrucción.