China: La guerra no resolverá la cuestión nuclear de Irán
Wang Yi criticó los ataques preventivos de EE. UU. e “Israel” contra Irán. Beijing reiteró su apoyo al uso pacífico de la energía nuclear y al diálogo regional.
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El ministro de Exteriores de China, Wang Yi.
El ministro de Exteriores de China, Wang Yi, aseguró este viernes que la guerra no puede resolver la cuestión nuclear de Irán y reafirmó el derecho de la República Islámica al uso pacífico de la energía atómica.
Durante una rueda de prensa conjunta con su par francés, Jean-Noël Barrot, el canciller asiático se refirió al reciente conflicto entre “Israel” e Irán como un escenario que no debe repetirse.
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También denunció los bombardeos, calificándolos de ilegítimos, y criticó especialmente el ataque estadounidense a instalaciones nucleares iraníes, describiéndolo como un acto “descarado” contra la soberanía de un Estado.
La causa palestina, clave en la región
Más adelante, el canciller chino señaló que no se puede aislar el problema nuclear iraní del conflicto palestino.
Según consideró, la raíz del desorden en Medio Oriente está vinculada a la falta de una solución real a la causa palestina, la cual definió como el “núcleo” de la inestabilidad regional.
Wang insistió en que la única salida realista es la implementación de la solución de dos Estados. En este sentido, pidió a la comunidad internacional tomar acciones concretas que apunten a ese objetivo.
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El jefe de la diplomacia china expresó el compromiso de Beijing de colaborar con Francia para impulsar la paz en la región.
China fue uno de los primeros países en condenar la agresión israelí contra Irán, y manifestó este sábado su rechazo a cualquier atentado contra la soberanía, la seguridad y la integridad territorial iraní.
El gigante asiático desempeña un papel activo en los esfuerzos multilaterales y mantiene una política exterior que prioriza el respeto a la soberanía de los Estados.
La reciente escalada entre Teherán y "Tel Aviv" reavivó preocupaciones sobre una expansión del conflicto, lo que ha llevado a potencias como China a redoblar sus llamados al diálogo.