Abuelas de Plaza de Mayo anunciaron la recuperación del nieto 140 secuestrado durante la última dictadura en Argentina (1976-1983) en un contexto de ataque a las políticas de memoria, verdad y justicia.

El joven nació en abril de 1977, en el centro clandestino de Bahía Blanca, y desde entonces permanecía desaparecido.

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La organización dirigida por Estela de Carlotto informó que el nieto se reunirá con su hermana, quien colaboró en el proceso de búsqueda.

El proceso de presentación será en la Casa por la Identidad, ubicada en el espacio de memoria, antiguo centro de detención clandestino que operó en la Escuela de Mecánica de la Armada.

Historia detrás de la nueva restitución

El nieto restituido es hijo Graciela Alicia Romero y Raúl Eugenio Metz, secuestrados en diciembre de 1976 en Cutral-Có, provincia de Neuquén, y hermano de Adriana Metz, que lo buscó por décadas. 

Durante 1977, el Ejército y la policía irrumpieron en la casa en la que vivía la pareja con su hija de un año y unos pocos días, y apresaron a los esposos. Ella estaba embarazada de cinco meses.

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Romero y Metz permanecieron cautivos inicialmente en La Escuelita de Neuquén, "donde fueron torturados física y psicológicamente", y después “sufrieron brutales tormentos" en Bahía Blanca.

De él se perdió el rastro en enero de 1977, según se reconstruyó en los juicios que se sustanciaron por la represión en el V Cuerpo de Ejército. Ella tuvo a su pequeño en abril de 1977 y también permanece desaparecida.

El viernes pasado el Banco de Datos Genéticos (BNDG) comunicó el resultado de ADN y "la Comisión le informó al hombre que efectivamente se trataba de un caso de apropiación y que su perfil coincidía con el de la familia Metz Romero".

Contexto de censura 

El rescate se dio en medio del feroz ataque a las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, y sobre todo de aquellas enfocadas a la restitución de la identidad de quienes fueron apropiados durante los años del terrorismo de Estado, señaló MinutoUno.

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Días atrás Abuelas de Plaza de Mayo denunció que el gobierno intervino en el BNDG e interpuso una medida cautelar ante la justicia para que proteja las muestras genéticas allí almacenadas. 

El año pasado, la actual gestión desmanteló también la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad y eliminó la unidad especial de investigación que funcionaba desde 2004 y tenía acceso a los archivos estatales para encontrar a los bebés secuetrados.