El cónsul honorario de “Israel” en la ciudad  neerlandesa de Maastricht, Benno Woosley, fue destituido tras criticar duramente al Estado sionista en entrevistas mediáticas, al afirmar que sus acciones en la Franja de Gaza “alcanzaban el nivel de genocidio”.

Según informó el diario israelí Yediot Aharonot, Woosley también se opuso a incluir el traslado de la embajada de Países Bajos a Jerusalén en los acuerdos de coalición del nuevo gobierno neerlandés.

 

 

 

 

 

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Un funcionario israelí declaró al mismo medio que sus comentarios dañaron las relaciones y “provocaron la ira de rabinos y líderes de organizaciones judías y cristianas”.

Otra fuente aseguró que, con más de 80 años, Woosley ya no estaba activo y que en los últimos años había recibido quejas de figuras influyentes de la comunidad judía por sus posturas.

Por su parte, el diplomático defendió sus declaraciones, afirmando que se basaban en imágenes ampliamente difundidas en el mundo, que generaron críticas inéditas contra "Israel", incluso de parte de sus principales aliados occidentales.

“Siempre dije la verdad y me mantuve en mis posiciones, no estoy dispuesto a mentir”, subrayó.

En paralelo, todos los ministros del partido neerlandés “Nuevo Contrato Social” dimitieron del gobierno, tras la renuncia del ministro de Exteriores, Kasper Veldkamp, ocurrida el viernes, motivada por el bloqueo de medidas adicionales contra "Israel" en el gabinete.