Familias de los  prisioneros israelíes se manifestaron este sábado en la carretera Begin, cerca de la sede del Ministerio de Defensa en "Tel Aviv", y acusaron al primer ministro de la ocupación, Benjamín Netanyahu, de "sacrificar a sus seres queridos por su futuro político".

En este contexto, el periódico Yedioth Ahronoth dijo que los familiares de los rehenes renovaron su petición al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para que presione a Netanyahu a fin de cerrar un acuerdo que conduzca a la liberación de sus hijos y al cese de la guerra.

También citó a un manifestante que dijo: "Netanyahu hace todo lo posible para sabotear cada acuerdo, y cada vez que surge una oportunidad para alcanzar un pacto y terminar esta guerra, se asegura de hacerlo estallar. Esta vez, hizo estallar las negociaciones literalmente con sus propias manos".

Por su parte, la madre del rehén Matan Tsengauker consideró que "solo la presión obligará a Netanyahu a alcanzar un acuerdo integral para la liberación de los secuestrados".

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"Netanyahu sacrifica a los secuestrados en el altar de su supervivencia política, quien quiere traerlos de vuelta no bombardea a quienes negocian con ellos ni rechaza un acuerdo integral", añadió.

Y continuó: "Netanyahu amenaza a "Israel" y envía a los soldados a emboscadas mortales por su futuro político, y nos condena a una guerra eterna".

Las manifestaciones se intensificaron tras el fallido intento de ataque contra líderes del movimiento Hamas en Doha, lo que generó temor entre las familias por el posible colapso de las negociaciones.

En paralelo, la oposición israelí reiteró que Netanyahu busca prolongar la guerra en Gaza para mantener su supervivencia política, influenciado por sectores de extrema derecha en su coalición.

Al respecto, el opositor Yair Lapid criticó duramente al gobierno, acusándolo de deteriorar la imagen internacional de "Israel" mediante una “mezcla letal de irresponsabilidad, amateurismo y arrogancia”.

Lapid instó a un cambio de liderazgo urgente, advirtiendo sobre el debilitamiento de las relaciones diplomáticas y las consecuencias que esto podría acarrear para su futuro político.