Agricultores de EE. UU. apuestan por vínculos con Cuba
A pesar de las sanciones y tensiones bilaterales, el sector agrícola de EE. UU. sostiene vínculos con Cuba, priorizando la cooperación técnica y comercial.
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Presidente de la Coalición Agrícola Cuba - EE. UU. Paul Johnson (Foto: Cubadebate)
En un contexto marcado por la permanencia de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo y el recrudecimiento del bloqueo, sectores de la sociedad estadounidense —especialmente vinculados a la agricultura— apuestan por el fortalecimiento de los vínculos entre ambos pueblos.
Como expresión concreta de ese interés, representantes estadounidenses participaron el lunes en La Habana en una nueva edición de la Conferencia Agrícola Cuba-Estados Unidos, donde reafirmaron su compromiso con el intercambio técnico, científico y comercial.
El presidente de la Coalición Agrícola, Paul Johnson, destacó que la cooperación bilateral presenta oportunidades reales en sectores estratégicos como la producción de alimentos, la investigación y el comercio.
Subrayó que, pese a las restricciones, las importaciones hacia Cuba crecieron un 17 por ciento en el último año, con una mayor diversidad de productos como arroz, aves y otros alimentos, gracias a nuevas medidas adoptadas por el país caribeño.
Johnson también mencionó avances en acuerdos académicos y técnicos, como los memorandos de entendimiento entre universidades y entidades productivas de ambos países.
No obstante, reconoció que persisten barreras estructurales, entre ellas las limitaciones financieras derivadas de la inclusión de Cuba en la lista estadounidense de países patrocinadores del terrorismo.
Por su parte, el directivo estadounidense involucrado en el proyecto, Andrés Schade, recordó que en 2024 se firmó un acuerdo trilateral entre el Centro Agrícola de la Universidad Estatal de Luisiana, el Departamento de Agricultura de EE. UU. y el Ministerio cubano de la Agricultura.
“Así que el objetivo de nuestro viaje es continuar con esta colaboración establecida en el memorándum del año pasado”, resaltó, y enfatizó la importancia de compartir experiencias productivas.
El director de Haynie Family Foods, P. J. Haynie, su expectativa de poder intercambiar con agricultores cubanos técnicas para cultivar arroz de forma más sostenible y obtener mayores rendimientos.
“La agricultura alimenta a siete mil millones de personas diariamente, y se proyecta que para 2050 esa cifra alcance los nueve mil millones”, precisó Haynie.
“Independientemente de la administración o los cambios políticos, todos tenemos que comer, y queremos asegurarnos de consumir productos de la mejor calidad posible”, concluyó.
La Conferencia Agrícola Cuba–Estados Unidos representa uno de los pocos vestigios de la etapa en que Washington y La Habana exploraban una normalización de sus vínculos.
Durante más de una década, organizaciones agrícolas y productores estadounidenses han mantenido el diálogo con sus contrapartes cubanas, apostando por la cooperación en el comercio y la producción de alimentos.
Hoy, ese esfuerzo persiste a contracorriente, en un escenario donde el bloqueo se ha recrudecido y la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo limita severamente las posibilidades de intercambio.