El Diálogo interreligioso en el pontificado del papa Francisco
Uno de los legados más importantes del Papa Francisco fue el establecimiento de puntos de encuentro, de puentes de entendimiento entre todas las religiones, conformando una apertura ecuménica de la Iglesia Católica hacia el mundo, a la diversidad, a la superación de las diferencias.
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El Diálogo interreligioso en el pontificado del papa Francisco
Dos hermanos que se encuentran: Iglesia Católica y Ortodoxa
Es el 12 de febrero de 2016, en La Habana, Cuba, la isla caribeña es testigo después de 962 años, del encuentro entre el Papa Francisco y el Patriarca Kirill de la iglesia ortodoxa de Moscú, quienes se abrazan como dos hermanos que se vuelven a encontrar. Es la presencia, el conocerse que con voluntad humana y política desemboca en estima, confianza y colaboración mutua.
Una característica propia de los encuentros del Papa Francisco, aun con quienes tenía las más profunda divergencia, donde invitaba al diálogo, a la unión como lo enfatiza en la declaración conjunta que firmara con el Patriarca Kirill: “la unidad se hace caminando. Trabajar y caminar, juntos, para que podamos dar esperanza a un mundo, que hoy, (...), se siente desorientado, asustado”
Pero además de ello, Francisco logró colocar en el centro de atención de este encuentro su preocupación por el destino del pueblo cristiano tratando con especial detenimiento la situación de los cristianos en el mundo, y en particular de los que sufren por su pertenencia a dicha fe.
Una vez más el pontífice desplazaba y dejaba atrás los cánones de lo que debió ser una reunión oficial de carácter diplomático centrada en las relaciones entre la Iglesia ortodoxa y la católica.
A 10 años de distancia, el peso histórico del encuentro de Cuba va surgiendo poco a poco precisamente el método propio del Papa Francisco de superar las diferencias que sentimos entre nosotros para hablar de lo esencial, para apelar juntos al mundo y sacudirlo, para proponer un testimonio de unidad y solidaridad.
Diálogo interreligioso y coexistencia pacífica
El diálogo interreligioso fue uno de los conceptos que a nivel político desarrolló el Papa Francisco, estableciendo con otros líderes religiosos, distantes a su credo, una relación, una retroalimentación de intenciones y comunicación, cruzando e intercambiando posiciones y realidades. Teniendo como visión el hecho de promover la coexistencia pacífica entre los seres humanos dentro del contexto de sus tradiciones religiosas, aceptando la diversidad que existe entre los diferentes credos.
En 2006, el Papa Benedicto XVI, en un discurso deleznable pronunciado en Ratisbona, Alemania, expresa una islamofobia sin precedentes, provocando una dura reacción en el mundo musulmán y con ello la ruptura de los espacios de entendimiento que habían sido abiertos por Juan Pablo II.
El Papa Francisco logró lentamente allanar el camino y las divergencias entre ambas religiones, primero dando pequeños pasos como el llamado a una jornada de oración, convocada por el pontífice en 2013, para evitar la escalada de la guerra en Siria. Posteriormente la visita del Imán sunita Al Tayyib a Roma en 2016, con la correspondiente visita del Papa en El Cairo.
Pero tal vez el acontecimiento más importante que verdaderamente signó el encuentro entre el Islam y el Catolicismo, fue la visita, en el 2021, del Papa Francisco al Ayatolá Al-Sistani, uno de los religiosos más importante del Islam chiíta, en la ciudad santa de Najaf, Irak, donde el pontífice suramericano llevó en la práctica un mensaje de la coexistencia pacífica no solo entre el Islam y el catolicismo, sino también entre las varias realidades que abarcan el mundo musulmán.
Igualdad como principio de vida
Entre las enseñanzas del Papa Francisco justamente se encuentra el haber llevado, en todos los ámbitos, no solo en su relación el Islam, sino como principio de vida, el sentido de la “igualdad”, de estar entre “iguales”, como una de las condiciones para poder llegar a un verdadero diálogo.
Es decir, una igualdad basada y fundamentada en supuestos éticos relativos al respeto, la aceptación y la integración. De hecho, para poder expresarse, la diferencia necesita la igualdad, un valor esencial para evitar que la diferencia se convierta en discriminación o subordinación.
Del mismo modo, la igualdad asume el carácter de homologación y negación de toda especificidad que separa. En este sentido, “igualdad” significa también aceptar las diferencias, la diversidad debe respetar las identidades peculiares implícitas y sustanciales de las distintas religiones, costumbres, tradiciones. Es una igualdad que se traduce en un lugar real y concreto, una realidad de encuentro e intercambio en la que pueden aflorar las peculiaridades sustanciales, interculturales e intersubjetivas, sin que ello afecte el entendimiento.
En ese histórico encuentro entre ambos líderes religiosos, también el Ayatolá Al-Sistani, demostró toda la sabiduría y los preceptos que se hallan en la Carta del Imán Alí a Malik al-Ashtar:
“¡Malik! Debes ser amable, compasivo y amar a tus súbditos. No te comportes (con ellos) como una bestia voraz y rapaz, considerándolos como una presa fácil, pues ellos una de dos: o son tus hermanos en religión, o se equiparan a ti en su creación (como seres humanos)”.
El Ayatolá Al-Sistani reconoció el carácter de “hermano en creación” del Papa Francisco, lo hizo sin perjuicio de clase o religión, sin preferencias o sectarismo. Lo reconoció por lo que era, al igual que el Ayatolá reconoce a los cristianos, con sus méritos y sus defectos, así como todos los hombres deben ser considerados por igual.
Pero, por otra parte, este “reconocimiento” de parte del Ayatolá fue un punto de encuentro con el Pontífice cristiano, quien en su encíclica “Fratelli Tutti (Todos somos hermanos)”, destacó la “fraternidad” que deben existir entre los seres humanos, cuyas palabras siguen teniendo fuerza y significado en la necesidad de un diálogo mundial que finalmente nos lleve a la tan anhelada paz en un mundo que está devastado, por todas las guerras en curso, y una humanidad que corre el riesgo de desaparecer por nuestra propia mano.
Referencias bibliográficas
Abi Tálib, A. (2009). Consejos para un buen gobierno. Carta del Imán Alí a su gobernador Malik Al-Ashtar. Teherán: Fundación Cultural Oriente.
Francisco. (2016). Declaración conjunta de La Habana, Papa Francisco-Patriarca Kiril. Recuperado de: https://www.vatican.va/content/francesco/es/speeches/2016/february/documents/papafrancesco_20160212_dichiarazione-comune-kirill.html
Francisco. (2020). Carta encíclica Fratelli Tutti .Vaticano: Libreria Editrice Vaticana.