En 2004, el ex primer ministro Rafic Hariri estuvo bajo la gran presión estadounidense para llevar a cabo un golpe de Estado en Ell Líbano, por lo que el país quedaría completamente bajo el dominio de EE.UU. o enfrentaría el caos. Rafik Hariri temía las consecuencias de esta presión y prefirió retirarse de la escena del gobierno.

Después de varios meses, el ex primer ministro fue asesinado y a través de este crimen el país fue explotado y entró en una crisis de la que no salió parcialmente de ella hasta el año 2009.

Hoy, Estados Unidos exige una de dos cosas, colocar a El Líbano completamente bajo su influencia, con el fin de compensar sus pérdidas políticas en Siria, o el caos.

Al igual que su padre antes, Saad Hariri no estaba de acuerdo con llegar al punto de contribuir a la explotación del país y causar el caos, por lo que fue presionado a renunciar de su cargo hace dos meses. 

Luego fue apuñalado por la espalda por las Fuerzas Libanesas hace unos días a través del anuncio de Samir Geagea sobre su intención de no nombrar a Hariri, y luego fue presionado para anunciar que no se presentará como candidato para el nuevo gobierno.

Algunos plantean la posibilidad de que no se nombre a un nuevo primer ministro, por lo que Saad sigue siendo el primer ministro provisional hasta que la situación cambie. 

Mientras, algunos sugieren elegir un jefe de un gobierno de confrontación. Sin embargo, la opción estadounidense será el caos...

Hasta ahora, hay una semejanza en el curso de los acontecimientos entre 2004 y principios de 2005, y lo que está sucediendo ahora. Por lo cual, todos en El Líbano deben interesarse por cuidar la vida de Saad Hariri...

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