Los propósitos de Washington son los de financiar la reconstrucción de Raqqa, considerada hasta ahora la capital del movimiento Estado Islámico (EI), y con ello crear condiciones para transformarla en una ciudad fuera del control de Damasco, estimó el senador ruso Frantz Klintsevich, quien ha dejado claro que las intenciones de EE.UU. son las de convertir a Al-Raqqa en el centro de 'otra Siria'.

Washington anuncia la donación de dinero para la reconstrucción de Raqqa y el restablecimiento de la vida pacífica de su población como pretexto para instalar allí una especie de nueva capital, en un intento por dejar ese territorio fuera de Al Assad, consideró.


Los medios de prensa locales han recordado las consideraciones de Occidente de no brindar ayudas humanitarias a los civiles en Raqqa, quienes había padecido cinco meses de bombardeos indiscriminados de la coalición occidental.

La víspera, el Pentágono anunció la liberación de Raqqa por parte del llamado Ejército Democrático Sirio (EDS), al tiempo que medios de inteligencia rusos captaron como el EDS dejó pasar sin contratiempos a las fuerzas del EI por territorios controlados por la citada agrupación armada.

La situación en las regiones de combate de Raqqa y la ciudad de Deir-Ezzor, atravesada por el Éufrates, se agudizó después que desde posiciones del EDS, bajo protección norteamericana, se produjeron ataques contra las tropas sirias, apoyadas por la aviación rusa.

Moscú debió advertir a Washington que cualquier otra acción de ese tipo desde posiciones del EDS, el foco de la misma sería eliminado con todos los medios disponibles por la agrupación rusa en la zona.

Donald Trump dijo que "el fin del califato de Daesh saltaba a la vista", después de haber sido recuperada la capital de Al-Raqqa.

Por su parte, algunos expertos han dicho que la recuperación de Raqqa no significa que la amaneza terrorista mundial se vea mitigada. Ya que el grupo terrorista, sigue manteniendo un territorio importante en Irak y Siria.

Asimismo advirtieron que sobre la probabilidad de que los ataques terroristas en el Reino Unido y otros países occidentales aumenten, a pesar de que Daesh sea expulsada de su capital de facto.

"Estoy complacido de anunciar que las Fuerzas Democráticas Sirias, nuestros socios en la lucha contra Daesh en Siria, han recapturado exitosamente a Raqqa, la autoproclamada ciudad capital del grupo terrorista", ha dicho Trump en un comunicado.

"Con la liberación del capital de Daesh y la gran mayoría de su territorio, el final del califato Daesh está a la vista".

El mandatario también ha asegurado que el grupo terrorista se "está rindiendo" porque él es presidente, al tiempo en que dijo que EE.UU. apoyará a las fuerzas de seguridad locales para reducir la violencia en Siria.

"Juntos, con nuestros socios y aliados, podremos implementar las negociaciones diplomáticas para poner fin a la violencia, que permita a los refugiados regresar a salvo a casa, y lograr una transición política que honre la voluntad del pueblo sirio", agregó.

Analistas advirtieron sobre la amenaza terrorista vigente, a pesar de la recuperación de Al-Raqqa, señalando que Daesh todavía tiene control sobre algunos bolsillos en Egipto y Libia y tiene afiliados que operan en países como Nigeria, Afganistán y Filipinas.

El grupo está encontrando formas nuevas de atraer a sus adeptos y formar nuevos afiliados, y lo están haciendo sin la promesa de "un estado islámico", señalaron.