EE.UU. anunciará compra de sistemas de defensa antiaérea para Kiev
La cadena estadounidense CNN reveló este lunes que Washington tiene el plan de anunciar en los próximos días la compra de unidades de sistemas de defensa aérea superficie-aire de mediano y largo alcance para su futuro envío a Ucrania
Estados Unidos planea anunciar compra de sistemas de defensa aérea para Ucrania, en medio de la escalada de tensiones con Rusia, revela CNN.
La fuente reveló este lunes, citando a un funcionario al tanto del asunto, que el Gobierno de Washington, presidido por Joe Biden, tiene plan de anunciar en los próximos días la compra de unidades de sistemas de defensa aérea superficie-aire de mediano y largo alcance para su futuro envío a Ucrania.
Según el informe, Kiev solicitó la entrega de sistemas de defensa antimisiles de NASAMS, dado que son capaces de derribar objetivos a una distancia de 100 millas (unos 160 kilómetros). Asimismo, la fuente ha señalado que, en caso de materializarse este pedido, militares ucranianos muy probablemente tendrán que someterse a la capacitación.
Subrayó que probablemente EE.UU. también anuncie otra asistencia militar, incluidas municiones de artillería adicionales y radares de contrabatería, a Ucrania, país escenario de la operación militar de Rusia.
Esto sucede después que Biden, actualmente se encuentra en Alemania en el marco de la cumbre del Grupo de los Siete (G7), prometió recientemente que su Administración entregará al país europeo "sistemas de misiles y municiones más avanzados".
G7 jura apoyar con uñas y dientes a Ucrania hasta que sea necesario
Además, Biden urgió el domingo a los aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y el G7 a “permanecer juntos” contra Moscú, mientras, a su juicio, el jefe de Estado ruso, Vladímir Putin, esperaba que, de alguna manera, el bloque militar y el Grupo de los Siete “se escindieran”.
Desde el inicio de la operación militar de Rusia en su vecino occidental, EE.UU. ha proporcionado varios lotes de ayuda militar a Ucrania con el objetivo de detener el avance del Ejército ruso.
Rusia, por su parte, advirtió sobre suministro de armas a Kiev, argumentando que son "no solo un movimiento peligroso, sino acciones que convierten a los convoyes pertinentes en objetivos legítimos".