Rusia y China recomiendan no sacar conclusiones precipitadas respecto a la autoría de los ataques a las refinerías sauditas
Los dos países llamaron a todos los países regionales y no regionales a evitar cualquier medidas o conclusiones precipitadas que puedan agravar la desestabilización.

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, llamó a abstenerse de sacar conclusiones precipitadas sobre los responsables de los recientes ataques a las refinerías sauditas.
"Consideramos negativo el aumento de la tensión en la región y llamamos a todos los países regionales y no regionales a evitar cualesquiera medidas o conclusiones precipitadas que puedan agravar la desestabilización, y al revés, seguir la línea que ayude a reducir las tensiones", dijo Peskov a los periodistas.
Así respondió a la pregunta sobre las declaraciones del secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, sobre la posible implicación de Irán en los ataques.
Al responder a la pregunta sobre la posible ayuda de Rusia a Arabia Saudita, el portavoz del Kremlin indicó que de momento no se ha recibido ninguna solicitud por parte de los sauditas.
Asimismo, señaló que las consecuencias de los ataques contra refinerías sauditas pueden ser graves para los mercados energéticos.
"Esperamos que la parte saudita pueda superar en breve los daños causados por este ataque", afirmó.
Peskov no excluyó también que el presidente de Rusia, Vladímir Putin, que visita este 16 de septiembre Turquía para participar en la cumbre trilateral sobre Siria, "intercambie opiniones" sobre lo ocurrido.
En lo referente a la visita de Putin a Riad programada para el mes de octubre, Peskov aseguró que los ataques contra refinerías sauditas no repercutirán en los preparativos del viaje.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores ruso comunicó a través de un comunicado que Rusia condena enérgicamente los recientes ataques a las refinerías saudíes.
"Condenamos decididamente los ataques contra los blancos civiles, la destrucción de la infraestructura social y económica, cualquier acción capaz de romper el equilibrio de demanda y oferta de hidrocarburos y provocar una nueva ola de inestabilidad en el mercado global de hidrocarburos que entrañe las consecuencias negativas para la economía global", dice el texto publicado en la página web de la Cancillería rusa.
La Cancillería rusa recomendó no sacar conclusiones precipitadas respecto a la autoría de los ataques a las refinerías ni aprovechar lo sucedido para agravar la situación en torno a Irán.
Por su parte, la Cancillería china insistió a evitar "acusaciones irresponsables" hasta que una investigación establezca la autoría de los recientes ataques contra dos refinerías de la empresa saudita Aramco.
"Hasta que se lleve a cabo una investigación exhaustiva y tengamos los resultados, es irresponsable acusar a nadie sin pruebas", declaró la portavoz de la Cancillería, Hua Chunying, al comentar las declaraciones sobre la supuesta implicación de Irán en esos ataques.
Hua agregó que "China se opone a cualquier paso que pueda derivar en una escalada de tensión".
"Esperamos que las partes ejerzan la moderación y se abstengan de acciones capaces de provocar una escalada", dijo.
A pesar de que los combatientes hutíes reivindicaron la autoría de los ataques y advirtieron que seguirán atacando el territorio de Arabia Saudita hasta que el reino cese acciones de combate en Yemen, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, acusó a Irán de estar detrás de los ataques en Abqaiq y Khurais y otro centenar de ataques contra Arabia Saudita.
En respuesta, Irán rechazó en términos contundentes la acusación, al subrayar que EE.UU. busca destruir su reputación y allanar el camino para futuras sanciones.