Parlamento boliviano pide juicio contra Áñez por actos ilícitos
La Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) de Bolivia pidió este jueves un juicio de responsabilidades contra Áñez y procesos ordinarios contra una veintena de sus ministros, jefes militares y policiales, por genocidio y otros delitos derivados de las masacres ocurridas tras su ascenso al poder.
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La expresidenta del gobierno de facto de Bolivia, Jeanine Áñez.
Según la resolución aprobada por el Legislativo, el juicio contra Áñez responde a la comisión de “hechos ilícitos identificados” y masacres de manifestantes ocurridas en los primeros días de su mandato.
Las masacres investigadas ocurrieron días después de su llegada al poder el 12 de noviembre pasado entre manifestantes que pedían la salida de Áñez y el retorno del gobierno del exmandatario Evo Morales.
Según el informe, el decreto firmado por Áñez, que aprobó la participación de militares en operaciones de represión, violando la Constitución y convenios internacionales de derechos humanos, provocó la muerte de 37 manifestantes, y dejo 861 heridos y mil 831 detenidos.
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— Senado de Bolivia (@SenadoBolivia) October 30, 2020
La #ALP aprueba informe final sobre las masacres de Senkata, Sacaba y Yapacaní, que recomienda un juicio de responsabilidades a Jeanine Añez por genocidio y otros delitos; y procesos penales contra 11 ministros y exministros por la vulneración de derechos y garantías. pic.twitter.com/Gb6m0MulcQ
“Este es un día histórico, tomamos la palabra para establecer que no se va a dejar estos hechos en impunidad”, dijo el diputado Víctor Borda, presidente de la comisión investigadora de las masacres ocurridas en noviembre en Sacaba, pueblo vecino a Cochabamba (centro), y Senkata, barrio de El Alto (oeste).
El informe establece que los manifestantes murieron por disparos de armas de fuego de uso militar y policial, en algunos casos activadas por francotiradores y desde helicópteros, contrariamente a la versión oficial de que los decesos habrían sido causados por disparos de los mismos civiles movilizados.
Morales renunció a su cargo el pasado 10 de noviembre tras una ola de protestas protagonizadas por la oposición, que desconoció su reelección en los comicios presidenciales del 20 de octubre, para, como explicó, evitar un “baño de sangre”, lo que provocó masivas protestas de sus partidarios exigiendo su regreso y la salida del gobierno de facto.
Ante todo esto, un año después del golpe de Estado contra Morales, su partido, Movimiento al Socialismo (MAS) volvió al poder en las elecciones del 18 de octubre.
