Bloqueo de EE.UU. afecta esfuerzos de transición hacia la recuperación y reconstrucción de Siria
“Esas medidas contradicen las normas del derecho internacional y los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas, en particular los principios de respeto a la soberanía de los Estados y sus derechos a la libre determinación y la no injerencia en sus asuntos internos”, dijo el representante permanente de Siria en Ginebra.
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El representante permanente de Siria ante la Oficina de las Naciones Unidas y las Organizaciones Internacionales en Ginebra, el embajador Husam Eddin Ala.
El representante permanente de Siria ante la Oficina de las Naciones Unidas y las Organizaciones Internacionales en Ginebra, el embajador Husam Eddin Ala, reiteró la condena de la República Árabe Siria a las medidas coercitivas unilaterales y las tachó de inmorales, y perjudican los esfuerzos de transición hacia la recuperación, el desarrollo y la reconstrucción.
“Esas medidas contradicen las normas del derecho internacional y los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas, en particular los principios de respeto a la soberanía de los Estados y sus derechos a la libre determinación y la no injerencia en sus asuntos internos”, dijo Ala en un diálogo con el Relator Especial de la ONU a cargo de los efectos negativos de las medidas coercitivas unilaterales durante el 48º período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos.
Destacó que la llamada Ley César, cuyos efectos sobrepasan las fronteras de los Estados Unidos, constituye un modelo de abuso del uso de la fuerza económica y financiera, y es una medida económica unilateral que carece de base legal o moral.
“Es una acción de terrorismo económico y EEUU debe rendir cuentas por esta ley que provoca un sufrimiento humano masivo y viola los derechos básicos de los ciudadanos, incluido el derecho a la vida, la salud, la alimentación y el desarrollo”, precisó el diplomático.
Aclaró que “desde 2018, el impacto de estas medidas se ha extendido ya que la Unión Europea y Estados Unidos recurrieron a endurecer el bloqueo económico sobre el pueblo sirio a través de medidas dirigidas a sectores vitales como la banca, la energía, las telecomunicaciones y el transporte, lo cual privó a los sirios de sus necesidades básicas, incluidos medicamentos, atención médica y alimentos”.
Desmintió las alegaciones de Estados Unidos y Europa sobre la existencia de “excepciones y exenciones” que facilitan la importación de bienes y materiales destinados a fines médicos, sanitarios y humanitarios, y consideró que eso es un intento de justificar estas medidas coercitivas al darle un falso tinte humanitario.
El Embajador exigió el levantamiento inmediato de esas medidas impuestas al pueblo sirio, ya que obstaculizan el trabajo de las agencias humanitarias para proporcionar ayuda de socorro y perjudican los esfuerzos de Siria para la transición hacia la recuperación, el desarrollo, la reconstrucción, y el regreso de los refugiados.
