Hace varios días, los congresistas demócratas Alexandria Ocasio-Cortez (N.Y.), Ilhan Omar (Minn), Ayanna Pressley (Mass.), Rashida Tlaib, (Mich.) y Cori Bush (Mo.), lograron matar una disposición en la Resolución de Continuidad de la Cámara que habría proporcionado mil millones de dólares para el sistema de defensa antimisiles Cúpula de Hierro de "Israel".

Según Dov S. Zakheim, asesor principal del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, el sistema Cúpula de Hierro es un elemento crítico en la capacidad de Tel Aviv para defenderse de los ataques de cohetes y proyectiles de artillería de corto alcance.

Si bien, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi parece haber adoptado una postura neutral en este asunto, Por su parte, los congresistas demócratas Steny Hoyer y Rosa DeLauro, apoyaron firmemente un proyecto de ley independiente para restablecer la financiación que varios demócratas pro-israelíes presentaron tras la votación de la Cámara de Representantes sobre la resolución continua. El proyecto de ley fue aprobado por la Cámara por una abrumadora mayoría de 420 a 9.

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A juicio de Zakheim, la resolución, que incluye disposiciones como la suspensión del límite de la deuda federal y la financiación de la ayuda para desastres y refugiados, no tiene prácticamente ninguna posibilidad de ser aprobada por el Senado. Sin embargo, el hecho de que por primera vez se haya negado a "Israel" un sistema de defensa antisimiales, por muy breve que sea, es un presagio ominoso para la estabilidad de la región.

De acuerdo con el experto, "Israel", al igual que muchos Estados de Medio Oriente, está cada vez más inquieto por la creciente inclinación de Estados Unidos a volverse hacia dentro.

La retirada estadounidense de Afganistán y la determinación de la administración Biden de revivir el acuerdo nuclear con Irán preocupa a los líderes israelíes. Por tanto, la medida de negar un elemento clave del sistema de defensa contra misiles y cohetes de "Israel" no hace sino intensificar las preocupaciones israelíes sobre la voluntad de Washington de apoyarlo frente a lo que "Israel" considera una amenaza a su propia existencia.

Comenta Zakheim que hace tiempo que a muchos políticos y analistas estadounidenses les preocupa que "Israel" lance un ataque preventivo contra Irán y arrastre a Estados Unidos a un conflicto. Si el ala izquierda del Partido Demócrata, cada vez más influyente, sigue aplicando políticas que parecen ser hostiles a "Israel", y en algún momento consigue negar a Tel Aviv los sistemas de defensa antimisiles, la tentación de que "Israel" se adelante sería cada vez más difícil de superar.

"Hay varias formas de presionar a "Israel" para que mejore la vida de los palestinos y se tome en serio la solución de los dos Estados, pero negar sistemas antisimiles a un Estado que sigue considerándose asediado no es una de ellas. Por el contrario, simplemente reforzaría la sensación de "Israel" de que su existencia sigue en peligro, con resultados que no sólo revertirían la capacidad de Estados Unidos de rebajar su perfil en Medio Oriente, sino que podrían arrastrarle de nuevo a esa región de forma aún más profunda y peligrosa que antes", concluye Zakheim.