Esfuerzos para neutralizar sanciones de EE.UU. no están vinculados a las negociaciones de Viena
Aunque la búsqueda de la eliminación de las sanciones es una agenda seria del gobierno, el esfuerzo en el decimotercer gobierno para neutralizar las sanciones no ha dependido de las negociaciones, dijo el presidente iraní.
El presidente iraní, Ebrahim Raisi, afirma que los esfuerzos para neutralizar las sanciones de EE.UU. a Irán no están ligados a las negociaciones de Viena con el grupo de países P4+1, y subraya que su administración no está poniendo todos los huevos en la misma cesta cuando se trata de dejar sin efecto las medidas coercitivas.
"Aunque la búsqueda de la eliminación de las sanciones es una agenda seria del gobierno, el esfuerzo en el decimotercer gobierno para neutralizar las sanciones no ha dependido de las negociaciones, por lo que hoy y bajo la situación de las sanciones, nuestras ventas de petróleo han aumentado tanto que ya no nos preocupan y los ingresos también están regresando al país", escribió Raisi en un tuit el viernes por la mañana.
Los diplomáticos de Irán y de las otras partes restantes del acuerdo con Irán de 2015, llamado oficialmente Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA, por sus siglas en inglés), están inmersos en la octava ronda de negociaciones diplomáticas en la capital de Austria para que Estados Unidos vuelva a participar en el acuerdo.
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, dijo que sólo quedan "unas pocas semanas" para salvar el JCPOA, advirtiendo que Washington estaba dispuesto a buscar "otras opciones" si las conversaciones de Viena fracasaban.
"Nos quedan, creo, unas pocas semanas para ver si podemos volver al cumplimiento mutuo", dijo Blinken en una entrevista con la emisora de radio pública estadounidense NPR.
Blinken dijo que Teherán ha hecho avances nucleares que "serán cada vez más difíciles de revertir porque están aprendiendo cosas, están haciendo cosas nuevas como resultado de haber roto sus limitaciones bajo el acuerdo".
Estados Unidos y los europeos utilizan la hipótesis de un arma atómica para hacer propaganda contra el programa de energía nuclear de Irán, que ha sido sometido a las inspecciones más intrusivas de la ONU.