Ejército de EE.UU. comienza a despedir a los militares que se niegan a vacunarse
Esta es la última rama de las Fuerzas Armadas de EE.UU. en ordenar el despido de los soldados no vacunados en plena pandemia de la COVID-19.
Los soldados del Ejército de EE.UU. que se nieguen a vacunarse contra la COVID-19 serán despedidos inmediatamente, según el comunicado que la institución publicó el miércoles. El aumento de los casos de infección por coronavirus en ese país obligó a imponer medidas disciplinarias más estrictas relacionadas con el rechazo a la vacuna en todos los servicios de las Fuerzas Armadas.
El Ejército ha sido la última rama de las Fuerzas Armadas estadounidenses en ordenar el despido de los soldados no vacunados en plena pandemia del coronavirus, después de que el Pentágono ordenara en agosto de 2021 que todo el personal militar se pusiera la vacuna. La mayoría de las tropas en servicio activo ya han recibido al menos una dosis del fármaco.
La orden del Ejército se aplica al personal regular, a los reservistas en servicio activo y a los cadetes.
"La preparación del Ejército depende de que los soldados estén listos para entrenar, desplegarse, luchar y ganar las guerras de nuestra nación", declaró la secretaria del Ejército de EE.UU., Christine Wormuth. "Los soldados no vacunados presentan un riesgo para la fuerza y ponen en peligro la preparación", añadió.
A finales de 2021 el Cuerpo de Infantería de Marina fue el más activo en despedir a los soldados que se negaban a vacunarse. Esta rama rechazó el 96 por ciento de las solicitudes de exención de las inyecciones, incluso por motivos religiosos.