Argelia califica de “matanza” la muerte migrantes en valla de Melilla, España
Piden apertura de una investigación independiente sobre los “trágicos hechos”.
Argelia calificó de “matanza” la muerte migrantes subsaharianos en el intento de saltar, el viernes pasado, la valla de Melilla, en el que alrededor de 2 000 de personas intentaron cruzar la frontera con España.
Amar Belani, enviado especial del Ministerio argelino de Asuntos Exteriores encargado de la cuestión del Sáhara Occidental y los países del Magreb, lo aseguró según la prensa local.
Para Belani, que pidió la apertura de una investigación independiente sobre estos “trágicos hechos”, “las imágenes de esta matanza son extremadamente impactantes, aportan información sobre la brutalidad extrema y el uso desproporcionado de la fuerza que son similares, dadas las circunstancias, a verdaderas ejecuciones sumarias”.
En las impactantes escenas difundidas en las redes sociales e incluso recogidas por la televisión estatal argelina se podía ver migrantes subsaharianos tirados en el suelo bajo la vigilancia de las fuerzas marroquíes que intervinieron brutalmente para impedirles cruzar la barrera que separa el territorio marroquí de Melilla.
El embajador argelino acusó a Marruecos de ser el responsable de esta tragedia y exigió que los organismos internacionales, y en particular el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, “realicen investigaciones independientes y transparentes para determinar la responsabilidad y arrojar luz sobre estos trágicos hechos”.
Los días previos, en el monte Gururú, donde se refugian los migrantes antes de prepararse para los saltos, habían sido duros, según relato de uno de los migrantes a El País. Las batidas policiales habían sido constantes y los agentes, como suele ser habitual, confiscaron dinero y comida, según fuentes que trabajan en el terreno. La precariedad y la falta de comida, cuenta Mamadou, precipitaron el salto antes de lo previsto. “Murieron tantos porque estaban débiles y hambrientos”.
Este salto fue diferente a otros por varios motivos. En primer lugar, los migrantes plantaron cara a los policías marroquíes, tanto en los campamentos del bosque como en su camino hacia la valla. El pasado sábado, según publicó El Faro de Melilla, se habían registrado más de 100 heridos entre las fuerzas de seguridad marroquíes tras un violento enfrentamiento con un numeroso grupo de migrantes que se había concentrado en una zona boscosa en las afueras de Nador.