El primer ministro de Malasia, Ismail Sabri Yaakob, anunció este lunes la disolución del Parlamento y la celebración de elecciones generales anticipadas en un plazo de 60 días, según lo establece la Ley estatal. 

Yaakob informó de su reunión con el rey malayo, Abdullah de Pahang, para obtener su aprobación e indicó que la Comisión Electoral decidiría la fecha de la votación.

También señaló que la disolución se hace para poner fin a los que cuestionan la legitimidad del Gobierno.

Malasia está sumida en la agitación política desde las últimas elecciones nacionales de 2018, cuando una alianza reformista liderada por el exlíder Mahathir Mohammad derrotó a una coalición liderada por la UMNO, el principal partido del país durante más de 60 años.

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El entonces primer ministro Najib Razak fue destituido tras verse envuelto en un escándalo en el que supuestamente se saquearon miles de millones de dólares del fondo soberano.

Tras un largo juicio, fue declarado culpable de corrupción y comenzó a cumplir una condena de 12 años de prisión en agosto por la primera serie de cargos. Se enfrenta a nuevos cargos que podrían mantenerlo en prisión durante más tiempo.

Sin embargo, las esperanzas de estabilidad tras la destitución de Najib se desvanecieron rápidamente, ya que el gobierno de Mahathir se derrumbó tras 22 meses debido a amargas luchas internas.

Muhyiddin Yassin, su antigua mano derecha, le sucedió, pero la creciente indignación pública por su gestión de la pandemia le obligó a dimitir menos de dos años después, e Ismail fue nombrado nuevo líder de Malasia.

Tras firmar una tregua con la oposición, el gobierno de Ismail fue relativamente pacífico, lo que permitió al gobierno centrarse en la recuperación de la pandemia.