Fuerzas Democráticas en Siria imponen reclutamiento forzoso e ilegal
Ese grupo paramilitar, auspiciado por Estados Unidos, secuestra menores y jóvenes para entrenarlos a la fuerza y emplearlos en la protección de convoyes de productos expropiados, como petróleo y trigo.
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Fuerzas Democráticas en Siria imponen ilegal reclutamiento forzoso
Militantes de las "Fuerzas Democráticas Sirias" (FDS) lanzaron campañas masivas de arrestos contra hombres jóvenes y menores de edad en los territorios controlados por ese grupo en el este de Siria, y los llevaron de inmediato a campos de reclutamiento obligatorio.
Fuentes cívicas de la gobernación de Hasakeh ratificaron a la agencia rusa Sputnik los vínculos de las FDS con el injerencista ejército de Estados Unidos, asentado en bases ilegales en la zona.
Según las fuentes confrontadas, desde hace varios días las FDS ejecutan esos secuestros de jóvenes nacidos entre 1998 y 2005 para entrenarlos en la guerra, bajo el pretexto de autodefensa.
Hay reportes de al menos 500 jóvenes obligados en todas las ciudades y pueblos de las gobernaciones de Hasakeh y Raqqa.
Las fuentes describieron puestos de control de las FDS, permanentes y temporales, en las ciudades de Hasakeh, Qamishli y al-Shaddadik, donde arrestaron a un gran grupo de hombres, incluso estudiantes universitarios y de la enseñanza media.
En respuesta, residentes del barrio occidental de al-Nashwa y de varios otros puntos de la ciudad de Hasakeh manifestaron su inconformidad frente al llamado cuartel general de "reclutamiento" de las FDS, para exigir la liberación inmediata de sus familiares, pero los demandados pidieron refuerzos militares para contener las protestas, incluso blindados del ejército norteamericano.
En Raqqa, fuentes locales informaron a Sputnik acerca de puestos de control de las FDS cerca del viejo puente de la ciudad, destinados a detener a los autos en tránsito para secuestrar a los jóvenes con destino a sus campamentos.
Además de hostigar a la población, los jóvenes entenados son destinados a participar en la protección de los convoyes de camiones y tanques que roban trigo y petróleo de Siria para beneficiar a los invasores.
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Menores también
De acuerdo con el reporte de Sputnik, la llamada "Juventud Revolucionaria", (Joanen Shoreshkar), afiliada al Partido de los Trabajadores del Kurdistán PKK, también es muy activa en las áreas controlado por las "FDS" en el este de Siria.
En esta semana, ese grupo secuestró a una niña de 13 años cerca de su casa en el barrio Aziziyah, en Hasakeh, con el objetivo de reclutarla para las filas del partido, y aún se desconoce su paradero.
Activistas humanitarios de la región sospechan del envío de la adolescente al campo de reclutamiento de niños en Jabal Abdel Aziz, en las afueras del suroeste de la ciudad, donde calculan estén retenidos unos 400 niños.
La cifra debe ser mayor, pero no hay estadísticas precisas debido a la amplia geografía de la región y el temor de las familias a reclamar a sus hijos por las reiteradas amenazas, contra ellos, o el uso de métodos de mediación de clanes y el pago de grandes sumas de dinero para su liberación.
Muchos padres pidieron al gobierno sirio, al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), y a la comunidad internacional y a las organizaciones internacionales que asuman responsabilidades y presionen a las fuerzas FDS y al ejército de la Casa Blanca para poner fin a esas acciones y llevar a sus responsables ante la justicia.
Destino Ucrania
Por otra parte, fuentes privadas revelaron a Sputnik que Estados Unidos trasladó unos 650 militantes de las FDS a Ucrania, a través de la región iraquí del Kurdistán.
Para lograrlo ofrecieron altos incentivos materiales a quienes desearan luchar, sobre todo militantes entrenados de las FDS, y con ellos algunos miembros de clanes en las regiones al este del río Éufrates.
Ese contrato para mercenarios alcanzó a varios militantes del PKK, a quienes proporcionaron salarios mensuales de dos mil dólares desde el momento de su entrenamiento en los campamentos estadounidenses.
Por esa vía, Washington transfirió 650 militantes a través de aviones privados y en lotes, desde el interior de la región del Kurdistán de Irak hacia Ucrania.
