Si los olivos conocieran las manos de Palestina
Alrededor de 100 mil familias palestinas en Cisjordania y Gaza dependen total o parcialmente de esta temporada para sobrevivir: el aceite de oliva es su sustento, su economía y su identidad.
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Si los olivos conocieran las manos de Palestina
“Si los olivos conocieran las manos que los plantaron, su aceite se convertiría en lágrimas.” —Mahmoud Darwish
La llegada del otoño es en la Palestina histórica el hito estacional más importante del año. Todos saben que a partir de entonces comenzará la cosecha de aceitunas y se producirá el aceite que sostendrá a los hogares durante meses.
Familias enteras —hombres, mujeres y niños— salen a los campos en una tradición que los conecta con el pasado, y crea recuerdos idénticos a los que compartieron sus ancestros.
Cada año, esta etapa hace que las personas vuelvan a enamorarse del olivo: el árbol del que uno cae y se rompe la mano, el de las ramas fuertes donde se ata un columpio, el que brinda la leña para la hoguera.
A su alrededor aún parecen escucharse risas, cantos y llantos de otros tiempos.
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Sin cosechas habituales
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Si los olivos conocieran las manos de Palestina
Desde el 7 de octubre de 2023, la temporada de recolección de aceitunas sufrió interrupciones por tres años consecutivos, 2023, 2024 y 2025.
Alrededor de 100 mil familias palestinas en Cisjordania y Franja de Gaza dependen total o parcialmente de esta temporada para sobrevivir: el aceite de oliva es su sustento, su economía y su identidad.
Durante los dos primeros años de esta serie de interrupciones, 29 palestinos fueron asesinados a sangre fría en sus olivares por colonos armados, amparados por el gobierno y protegidos por el ejército de ocupación israelí.
La superficie total de tierras palestinas asciende a equivalentes a 602 mil 500 hectáreas. De ellos, 113 mil 852 son tierras agrícolas, lo que representa el 18,9 por ciento del territorio.
El olivo como símbolo de lucha nacional
Es difícil hablar del aceite de oliva en la cocina palestina sin mencionar que es un símbolo por el reconocimiento nacional. Es, quizás, el alimento más político del mundo.
Miles de familias depende de las aceitunas: el fruto y el aceite deben sostenerlas económicamente hasta la próxima cosecha.
Por eso, esta temporada habla también del derecho a la tierra, del tiempo y de la paciencia, porque los olivos crecen despacio y tardan años en dar fruto.
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Platos con aceite de oliva
La cocina palestina celebra esta época con recetas tradicionales que giran en torno al aceite nuevo.
Antaño, el aceite de oliva era el único utilizado en los hogares, y todavía hoy es posible encontrar, en casi cada cocina, un plato de za’atar con aceite, listo para mojar el pan del desayuno.
Incluso los postres se reinventan: una tarta de chocolate, dátiles y aceite de oliva —inspirada en las tradicionales galletas ka'ak— combina una masa quebrada espolvoreada con semillas de nigella y un relleno de dátiles dulces, ganache de chocolate y aceite de oliva.
Amaya Rubio Ortega
Al Mayadeen Español