¿Qué secretos esconden las piedras solares de Bornholm, Dinamarca?
Los sacrificios rituales surgieron en respuesta cultural a las tensiones ambientales.
El enterramiento ritual de cientos de piedras solares, decoradas con imágenes del sol y plantas, en un yacimiento neolítico de Bornholm (isla del mar Báltico), coincidió con una gran erupción volcánica que oscureció el norte de Europa.
Investigadores del Instituto Niels Bohr de la Universidad de Copenhague, tras analizar núcleos de hielo, relacionaron estos eventos.
Según los expertos, el ritual, consistente en "sacrificios" de rocas, representó un intento de los habitantes de la isla por apaciguar a las fuerzas naturales y asegurar el retorno del sol y la prosperidad de las cosechas.
"Hace tiempo que sabemos que (la estrella) era central para las primeras culturas agrícolas", afirma el arqueólogo Rune Iversen, de la Universidad de Copenhague.
La relación entre los fenómenos climáticos y los cambios sociales son un tema recurrente a lo largo de la historia.
En este caso, la dependencia de la agricultura por parte de los pueblos neolíticos los hizo especialmente vulnerables a las perturbaciones causadas por la naturaleza.
Además, la mención de enfermedades generalizadas durante este periodo añadió otra capa de complejidad a los retos enfrentados por estas comunidades.
El declive de la cultura local sugirió que estas tensiones combinadas, cambio climático, enfermedades y, posiblemente, agitación social, provocaron transformaciones significativas en su modo de vida.