¿Un nuevo Sahara? Las lluvias reverdecen partes del desierto
Cuando las precipitaciones comenzaron hace unas semanas, el país atravesaba un año seco, similar al anterior.
Dicen los antiguos moradores de la ciudad de Merzouga, en el sureste del Sáhara, Marruecos, que nunca antes las aguas envolvieron tanto un rincón del desierto.
Muchos de ellos están sorprendidos ahora que las lluvias repoblaron lagos, reverdecieron las dunas y atrajeron a más turistas a la zona.
Cuando las precipitaciones comenzaron hace unas semanas, el país atravesaba un año seco, similar al anterior.
En este momento, todos comentan que un lago en el Parque Nacional de Iriqui, el más grande del reino, volvió a la vida tras estar seco durante 50 años, junto con otros nuevos cuerpos de agua en el noroeste.
No obstante, el fenómeno, como los monstruos, rugió y trajo devastación en algunas localidades del territorio africano.
En varias ciudades y pueblos, las inundaciones causaron más de diez muertes y dejaron decenas de desaparecidos.
Los expertos relacionaron el acontecimiento con el cambio climático, aunque es demasiado pronto para afirmaciones definitivas sin estudios profundos.
Aunque las tormentas ayudaron a llenar de forma parcial algunos embalses y a rellenar los acuíferos subterráneos, para que esos niveles aumenten de forma significativa tendrían que continuar durante un período de tiempo más largo.