Autoridades de salud advierten sobre la grave situación en Gaza
La Franja de Gaza se convertirá en una fosa común tras el colapso de los hospitales y los miles de cadáveres que aún permanecen bajo los escombros.
La ministra palestina de Salud, Mai Al-Kaila, informó sobre la grave situación en los hospitales de la Franja de Gaza, la escasez de medicamentos y el casi imposible acceso a las instituciones médicas, en un momento en que los cortes de agua y el deterioro del sistema de alcantarillado, aumentan los riesgos de propagación de enfermedades transmisibles.
A su vez, la Oficina de Información del Gobierno gazatí anunció que los hospitales dejarán de funcionar en cuestión de horas y ese territorio palestino se convertirá en “una fosa común”.
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Mientras, el corresponsal de Al Mayadeen constató que más de 30 centros de salud están ya fuera de servicio y otros están sujetos a las amenazas de ocupación.
De acuerdo con el director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, también escasean el agua potable y los alimentos en toda la Franja.
Según agregó, los suministros de la organización están atrapados en la frontera desde hace cuatro días y exigió permitir su entrada inmediata a territorio palestino.
Por su parte, la oficina de información de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés) en Gaza confirmó que sus escuelas recibieron a unos 500 mil desplazados necesitadas de ayuda urgente.
Un desastre ambiental amenaza a Gaza
A su vez, el portavoz de la oficina de medios del gobierno en Gaza confirmó que la ocupación cometió masacres contra cientos de familias y los sobrevivientes ahora no tienen hogar y duermen en las calles.
Muchos se refugian en los hospitales donde la situación también es precaria, agregó el vocero.
Por otra parte, advirtió que más de mil 500 cuerpos siguen bajo los escombros de los edificios siniestrados, lo cual constituye una grave amenaza ambiental.
El corresponsal de Al Mayadeen también informó de la muerte de 25 personas, entre ellos niños, mujeres y civiles, durante varios bombardeos a varias casas, en el sur de la Franja de Gaza.
Tras once días de bombardeo indiscriminado sobre Gaza, más de tres mil 200 civiles palestinos murieron, 11 mil están heridos y el 70 por ciento de ellos son niños y mujeres.
Además, los misiles enemigos destruyeron barrios completos y derribaron 120 mil viviendas sobre las cabezas de sus pobladores.